Tanto si se trabaja en una oficina como en un local comercial, las siguientes tendencias, recopiladas por los mejores expertos en reformas integrales, harán más fácil una reforma integral del lugar de trabajo:
1. La oficina como centro de atención
Este año, las reformas de oficinas están orientadas hacia la innovación, la conversación entre empleados y las reuniones con los clientes. Las salas de trabajo son cada vez más importantes que los despachos individuales, al igual que las salas de conferencias.
2. Espacios comerciales de estilo moderno
El estilo moderno es imprescindible. Inspirado en la filosofía del arquitecto Louis Sullivan, padre de la arquitectura modernista, sigue un principio sencillo: «La forma sigue a la función».
Los muebles deben ser ante todo funcionales. Esto significa que se omite la ornamentación innecesaria y se utilizan formas geométricas con bordes suaves y líneas limpias. Este estilo también se inspira en las formas orgánicas y las suaves curvas que se encuentran en la naturaleza y abarca una gran variedad de materiales, desde la madera y el cuero hasta la teca.
Por ello, para hacer un cambio de imagen a una oficina y convertirla en moderna y elegante, es ideal utilizar el menor número posible de muebles y pintar las paredes blancas que hagan resaltar la arquitectura y el mobiliario. También debe tener muchas ventanas.
Sin embargo, se puede incorporar algunos toques de colores marrón, gris o incluso colores más vivos para contrastar con los materiales naturales utilizados.
Para una mayor originalidad, se puede optar por un diseño inspirado en lofts, que combina la estética moderna con un creativo toque vintage.
3. El estilo clásico, una tendencia atemporal
Como su nombre indica, el estilo clásico es intemporal. A diferencia del estilo moderno, se aprecian molduras y decoraciones más detalladas.
La palabra clave es el juego de texturas y materiales. Por ejemplo, se puede optar por molduras antiguas, un suelo de madera y muebles contemporáneos de diseño refinado para no sobrecargar el espacio y crear así un contraste.
Por otro lado, también se pueden elegir muebles con tiradores dorados y algunos objetos decorativos antiguos (jarrones, candelabros, platería, etc.) como toques discretos. Sin embargo, esto implica que se deba optar por paredes y revestimientos más sencillos.
Sea cual sea el enfoque de este estilo, la madera sigue siendo una buena idea para los muebles principales. En cuanto a los colores, siguen en tendencias de pinturas los tonos sobrios y claros, como el blanco, el gris, el beige o el topo, que se puede contrastar con cortinas o alfombras estampadas, así como con algunos toques de colores más vivos en la decoración.
4. Madera natural para espacios de trabajo cálidos
Este 2022, al igual que en años anteriores, la madera sigue siendo la favorita en el diseño de interiores.
En primer lugar, porque encaja bien con todos los estilos (siempre que se sepa combinar con otros materiales). También porque aporta suavidad y sofisticación a los espacios.
Al decidir integrarlo en las paredes, en los muebles o incluso convertirlo en el elemento central de la oficina optando por suelos o paredes de madera, este material aportará calidez a los espacios comerciales. Ya sea en bruto o laminada, según el estilo que se desea dar a la oficina, la madera se adapta igualmente a diseños elegantes o a estilos más sofisticados.
Es importante combinarlo con otros materiales como el metal, el hormigón o incluso el mármol, para evitar un diseño demasiado sencillo.
5. Transparencia en el diseño y en el origen de los materiales
Las ventanas panorámicas son las favoritas, ya que amplían el espacio, hay que tener en cuenta que un espacio de trabajo luminoso será mucho más estimulante para los empleados y aportará algo de naturaleza al edificio.
Si las ventanas son limitadas en la oficina, se puede utilizar paredes de cristal como separadores siempre que sea posible, esto refractará y difundirá la luz. Este tipo de ventanas en lugar de paredes, darán a las oficinas más dimensión y abrirán el espacio. De hecho, la tendencia es hacia los espacios de trabajo abiertos y flexibles como los coworking, que dan un ambiente más agradable y acogedor al lugar de trabajo.
La transparencia no se detiene en el diseño que se elija, porque si hay algo en tendencia es la importancia de consumir de forma local y ecológica. Así, esta tendencia ha llegado para quedarse, favorecer cuanto antes los materiales buenos para el medio ambiente, sostenibles y procedentes de pequeños circuitos que permitan una mayor trazabilidad.
6. Zonas de relajación para aumentar la productividad
Los empleados felices y descansados son empleados productivos. Para reducir la rotación de los empleados, es importante mantenerlos motivados y en forma. Por eso es importante incorporar elementos que les permitan desconectar del estrés del trabajo.
Una tendencia de diseño de oficinas es crear un rincón relax que hace todo esto añadiendo un área de descanso. Este espacio permite a los empleados establecer vínculos y desarrollar sinergias. También es una gran oportunidad para estimular la creatividad. Sofás, sillones, todo está dispuesto para ofrecer a los empleados unos momentos de relax entre reuniones.
7. Naturaleza en el interior para que el espacio respire
Las plantas ofrecen muchos aspectos positivos a cualquier espacio interior. No sólo son buenas para la salud mental de los empleados, sino que también aportan un toque de frescura a la decoración de la oficina. Añadir varias plantas verdes o con flores suavizará la frialdad de los monitores de ordenador, las lámparas de escritorio y otras luces de neón que a veces hacen que los lugares de trabajo parezcan sombríos.
Unas macetas con plantas en la oficina, macetas colgantes, jardineras en las zonas comunes o incluso un jardín vertical en la recepción completarán el efecto de calidez deseado.
8. Elementos de diseño en colores naturales
Además de las plantas y la madera, que aportan un poco de aire libre al espacio de la oficina, los colores naturales siguen siendo el camino a seguir.
En lugar de los habituales tonos grises, se puede seleccionar tonos de beige, verde claro o marrón claro que sean suaves a la vista y contrasten con las frías herramientas tecnológicas que llenan las oficinas.
- El verde es uno de los favoritos, ya que complementa los acentos de madera y aporta energía al espacio, sin ser agresivo ni distraer.
- El beige suave también realzará un aspecto minimalista y da al espacio una sensación de calidez.
- El azul también está de moda este año porque proporciona un ambiente tranquilo y seguro para trabajar. Sin embargo, es necesario evitar los tonos llamativos y optar por el azul cobalto, el real o el de medianoche.
- Para las zonas de descanso, es preferible elegir unos toques de amarillo que aporten energía y positividad al entorno de trabajo.
En resumen, hay que inclinarse por los colores claros para las grandes superficies y mantener los colores más vivos en toques ligeros, como en las paredes de acento.
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