Tras los gastos propios del mes de diciembre, llega el momento de enfrentarse a la cuesta de enero, una época en la que las familias españolas deberán asumir las consecuencias de los excesos de la Navidad y el pago de determinados servicios anuales. Por desgracia y tal y como indica el comparador financiero Acierto.com, la imparable escalada de la energía, los alimentos, el carburante, y el transporte, no lo pondrán nada fácil este 2022. La plataforma analiza cuáles son los servicios que más acusarán estas subidas y recopila una serie de consejos financieros para hacerles frente.
Una cuesta de enero muy dura
Así, y según los datos a los que ha accedido la entidad, se calcula que el incremento de los precios será de casi un 4% para el conjunto del año. No obstante, el aumento de la inflación en 2021 ha alcanzado el 6,7%, algo que se encuentra estrechamente relacionado con la subida de la energía.
Se espera que el precio de la electricidad siga creciendo por encima de los 300 euros el megavatio hora a principios de este año. Respecto al gas natural, hemos empezado 2022 con un aumento del 5,5% respecto del año anterior. En situación similar se encuentran los costes de los carburantes, que se hallan muy cerca de sus máximos históricos, con incrementos por encima del 25% y 27% (gasolina o diésel). La subida energética, al mismo tiempo, se ve reflejada en otros ámbitos, pues afecta a negocios y a particulares, a la producción de alimentos y ropa, etcétera.
También se prevé una subida del precio de los vehículos como consecuencia del fin de la congelación del impuesto de matriculación. Y de la vivienda. En este caso rondará el 4%.
Más allá de estas subidas, otro condicionante que puede haber incrementado el gasto es el hecho de recibir la paga de Navidad. “En muchas ocasiones, disponer de más dinero de forma puntual nos hace gastar de más”, comentan desde el comparador financiero. Las cifras revelan también que, durante los últimos tres meses, el crecimiento del consumo ha sido un 9% superior que el año pasado.
Todo esto se encuentra ligado a la falta de educación financiera que existe en España; una carencia que dificulta el ahorro y que podría estar relacionada con la falta de interés que suscita esta materia (solo es interesante para el 12%).
En definitiva una coyuntura que repercutirá en una pérdida de poder adquisitivo de las familias, muchas de las cuales todavía se encuentran en ERTES o en situación de precariedad como consecuencia de la crisis sanitaria y económica del coronavirus.
Consejos para superar la cuesta de enero
Dicho lo cual, el comparador financiero Acierto.com recopila una serie de consejos para afrontar la cuesta de enero y hacerla menos empinada.
Planificar un presupuesto: planificar un presupuesto cerrado, acorde con las necesidades reales será clave para evitar gastar de más. En cualquier caso, la organización de las finanzas y el análisis de la situación financiera son fundamentales.
Apostar por la cocina de temporada: para evitar gastar de más en alimentación una buena opción es recurrir a las ofertas y a la cocina de temporada. Se trata de productos que habitualmente tienen un precio inferior. Los congelados (que no ultraprocesados) son también una excelente alternativa para abaratar costes. También es conveniente hacer la lista de la compra antes de ir al supermercado y ceñirse a ella. Y evitar comprar antes de comer o cenar (en definitiva, con hambre).
Consumir de forma responsable: también en lo que atañe a la comida. De hecho, durante los últimos años el desperdicio alimentario no ha dejado de crecer, y se calcula que solo el año pasado se desperdiciaron más de 1.300 millones de kilos de alimentos en España.
Reducir gastos innecesarios: relacionados con el ocio, por ejemplo. Es importante centrarse en los gastos prioritarios. Reducir el precio de las facturas: aunque en el momento actual resulta todavía más complicado, es posible reducir el precio de las facturas de la luz, el agua y el gas. Apostar por electrodomésticos más eficientes, utilizar la luz natural y el sol en nuestro beneficio, emplear programadores, evitar el standby, etcétera, nos ayudará.
Dar de baja los servicios que no se usan: las suscripciones que no utilizas con demasiada frecuencia pueden ir sumando.
Cuidado con las rebajas: en época de rebajas podemos dejarnos llevar por la impulsividad. De hecho, se estima que 3 de cada 5 consumidores compran productos baratos que no necesitan. No obstante, también es interesante recurrir a ellas si habíamos esperado a estas fechas para comprar cosas que necesitábamos.
Comparar antes de comprar: directamente relacionado con el punto anterior y para no dejarse llevar por los precios, podemos comparar. Existen apps específicas que permiten revisar el historial de precios a lo largo del tiempo. Asimismo, es importante comentar que hasta el 93% de los consumidores asegura comparar online antes de adquirir un bien o servicio. Así lo apunta el informe de Acierto.com.
Utilizar aplicaciones de chollos en productos de primera necesidad: las aplicaciones de chollos y cuponeras también pueden ser de ayuda. Es fácil encontrar descuentos en alimentación, ropa, utensilios de la casa, para el colegio, etcétera. Y todo suma.
Crear una cuenta ahorro: que se alimentará durante todo el año y que servirá para cubrir gastos inesperados.
Financiar la cuesta de enero, ¿buena idea?
Por otra parte, el comparador financiero Acierto.com recomienda recurrir a la financiación si es necesario para enfrentarse a la cuesta de enero. “Hay opciones incluso que no generan intereses y que suponen un desahogo importante para las familias que tienen una necesidad puntual. Eso sí, debemos estar seguros de que podremos devolver el dinero que nos presten y de que se trata de algo coyuntural”, comentan desde el comparador.
Es el caso de las tarjetas de crédito, por ejemplo. “Casi todo el mundo tiene una tarjeta de crédito. Se trata de productos que permiten disponer de dinero a crédito y, habitualmente, devolverlo a final de mes sin que esto genere intereses adicionales, aunque depende de cada entidad”, aseguran los expertos de Acierto.com. No obstante, si no tenemos todavía una, su concesión puede alargarse hasta un mes. “Otra de sus grandes ventajas es que las tarjetas permiten fijar un techo de gasto para no excedernos en nuestros gastos”, añaden.
También puede resultar interesante recurrir a un préstamo rápido, cuya concesión es casi inmediata y mucho más rápida que la de un préstamo personal al uso. Se tarda en tener respuesta sobre su concesión entre 15 minutos y 48 horas. Las cantidades que se piden con este producto suelen ser inferiores (entre 300 y 15.000 euros), y tener intereses mayores. Algo parecido ocurre con los minicréditos, en cuyo caso hablaríamos de honorarios, que también tienden a ser altos.
Otra alternativa es pedir un adelanto de nómina. Este dependerá de nuestro salario y consiste en multiplicar la nómina un número determinado de veces. Puede solicitarse al banco pero también a la empresa en la que se trabaje. Eso sí, se requiere de cierta antigüedad como cliente de la entidad, entre otros requisitos habituales.
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