La gestión de la motivación es uno de los principales objetivos de Directores de Personas. Tener empleados fieles y motivados es el sueño de todas las empresas. ¿Cómo pueden las empresas influir en la carga de motivación de sus empleados para maximizar sus resultados?
Es importante llenar el tanque… pero también que no se vacíe
Para que las cosas vayan bien, el depósito de la motivación individual y colectiva debe estar lleno. Este depósito se vacía conforme avanza la actividad, debido al paso del tiempo y el desgaste propio de la exigencia en el día a día.
Un estudio de la Harvard Business School señala que en un 85% de los casos, la motivación interna del empleado suele desaparecer tras seis meses en el puesto de trabajo. Por lo tanto, una de las preocupaciones de la empresa es reducir esa pérdida de motivación.
Según el mencionado estudio, “Employee Motivation: A Powerful New Model” (Motivación del empleado: un poderoso nuevo modelo), las personas que trabajan para una empresa se mueven por cuatro impulsos básicos:
- Adquisición. Experimentamos satisfacción cuando conseguimos algo, y desagrado cuando no. Este fenómeno no se refiere únicamente a bienes físicos, sino que también hace referencia a posesiones “emocionales” como viajes, experiencias o eventos que nos hagan mejorar nuestro status social y que sirvan para reconocer nuestros esfuerzos.
- Unión. Entendido como el sentido de pertenencia a un colectivo. Cuando se cumple, aumentan las sensaciones positivas como el amor y el cuidado. Su ausencia, en cambio, provoca soledad y aislamiento. En el trabajo, este impulso significa un aumento de la motivación cuando los empleados se sienten orgullosos de pertenecer a la empresa, y a la inversa cuando se sienten poco valorados. Se debe considerar especialmente con las personas en teletrabajo.
- Comprensión. Entender el mundo que nos rodea y sentirse partícipe de ello es muy importante. En una empresa, los empleados deben formar parte de lo que se está construyendo entre todos. En el lugar de trabajo, el impulso de comprender explica el deseo de contribuir al bien común. Este punto favorece la retención del talento.
- Protección. El ser humano necesita sentirse protegido de las amenazas exteriores. Una empresa, en este sentido, debe favorecer la supervivencia de cada uno de sus miembros, ya que entre todos se construyen proyectos profesionales a largo plazo. Si los resultados colectivos son positivos y se comparten, los individuos prosperan y se sienten más protegidos.
Según este estudio, si una empresa consigue dar cobertura a estas motivaciones personales, aumentará en más del 38% la motivación de su plantilla.
Cómo llenar el depósito: el salario emocional
Entre las cosas que la empresa debe hacer para llenar el depósito de motivación está la de su política retributiva. Hace tiempo que la remuneración dejó de ser como un concepto exclusivamente materialista para pasar también al plano emocional, junto con otros tipos de reconocimientos. Por ejemplo, según un informe de Incentive Research Foundation, más de la mitad de las empresas británicas han dejado de dar incentivos en dinero a sus empleados, introduciendo nuevos conceptos de incentivos. El resultado se consigue con una correcta política retributiva mixta con dinero e incentivos emocionales.
Una empresa puede convertir la entrega de incentivos en algo más que una contrapartida por las horas de trabajo de cada día:
- Incentivos a la consecución de resultados: concursos de ventas, programas de recomendación internos, premios por esfuerzos puntuales, …
- Incentivos al bienestar: fomentar una vida saludable, favoreciendo iniciativas corporativas para la salud, el deporte, la comida sana, un mayor acceso a la cultura, acciones con compañeros, horario flexible, …
- Celebración de acontecimientos personales: por nacimiento de hijos, cumpleaños, bodas, …
- Eventos y celebraciones corporativos: regalos de aniversario de la empresa, lanzamientos de productos, regalos de Navidad, campañas solidarias o voluntariado, …
- Beneficios sociales adaptados a la situación personal: retribución flexible, conciliación de la vida personal y profesional, teletrabajo, días de descanso, formación, …
Al equilibrar el pago de incentivos en nómina y el salario emocional, la empresa puede encontrar fórmulas más imaginativas y que permiten entregar una recompensa con un mayor impacto en la motivación.
Tarjetas regalo: a caballo entre el incentivo en metálico y el regalo emocional
Muchas empresas optan por entregar una tarjeta regalo en sus acciones de motivación. De esta manera, se consigue el efecto sorpresa y calidez al entregar un regalo con un mensaje personalizado, además con la garantía de acertar en aquello que el empleado puede necesitar y agradecer: desde ropa a alimentación, pasando por gasolina, productos de electrónica, belleza, cultura, deporte, …
Click&Gift, empresa pionera en el desarrollo de soluciones de incentivo digitales, ha desarrollado una tarjeta regalo en internet que facilita la logística del regalo, hasta tal punto que toda la gestión, envío y uso se realizan de forma online. Perfecto para equipos en teletrabajo. La empresa decide qué importe recarga a cada empleado, escoge entre las múltiples opciones de personalización, mientras que los empleados usan el saldo disponible en marcas como Amazon, El Corte Inglés, Decathlon, Ikea, FNAC, The Phone House, Pepe Jeans, Media Markt, Atrápalo y muchas más. Son algunas de las opciones de entre más de 50 tiendas online y más de 3.500 puntos de venta físicos. Gracias a esta solución, cientos de empresas en España ya premian a sus empleados de la forma eficiente, cómoda y con la emoción de un regalo de verdad.
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