El próximo día 30 de septiembre, los autónomos se despedirán del sistema de ayuydas extraordinarias al que han podido acceder desde el inicio de la pandemia. Pese a que los principales colectivos de trabajadores por cuenta propia pedían incluso ampliar esas ayudas y regresar al sistema extraordinario por cese de actividad, con mayores beneficios para ellos.
Lejos de pretender incluso mantener el sistema actual, el denominado esquema ‘complementario’ que suponía la exención de cuotas a la Seguridad Social que pasó a ser parcial en agosto (50%) y septiembre (75%) para autónomos que reconociesen pérdidas de al menos el 75%, el Gobierno ha puesto tope a estas ayudas alegando que que el colectivo se está recuperando y que el dinero para las prestaciones se está acabando, tal y como transmitireron desde el Ejecutivo a los colectivos de autónomos: «Las cifras de vuelta a la actividad no son malas; hemos gastado muchísimo dinero y los fondos se están agotando».
Un mal verano para autónomos y pequeños comercios
Por contra, los autónomos sostienen que el verano ha sido muy malo y que los negocios, lejos de recuperarse, siguen a medio gas. Además, con la llegada de septiembre y en plena segunda ola del virus muchos se están viendo perjudicados por las nuevas restricciones. Por ello, los autónomos sostienen que las prestaciones extraordinarias no solo son necesarias sino que deben volver a su formato inicial, con mayores beneficios para ellos.
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