El 56,2% de los empleados en España no cuenta con un plan de ahorro o inversión complementario a su jubilación pública. Esta es una de las conclusiones más llamativas del “Barómetro de Previsión Social Empresarial” de Nationale-Nederlanden, un estudio sociológico elaborado en colaboración con el área de Investigación de ATREVIA a partir de 2.386 encuestas a empleados con contrato indefinido en empresas ubicadas en el territorio nacional. Si fijamos la vista entre los que se sitúan al otro lado de la balanza y, por tanto, cuentan con algún producto de ahorro para su jubilación, vemos que, del total de empleados, el 12,3% lo han contratado a través de su empresa y el 35,9% de forma particular.
¿Y qué tipo de productos son los más contratados? En cuanto a los empleados que tienen contratado algún producto de ahorro a través de las empresas, el 79% de los empleados tiene un Plan de Pensiones de Empleo, seguido por el Plan de Previsión Social Empresarial (15,3%) y por el seguro colectivo de jubilación (12,6 %).
El Plan de Pensiones es el producto elegido por un 63,5% de los españoles que contratan de manera particular, seguido por los productos de seguros (SIALPs, PIAS, PPA, rentas vitalicias y seguros de ahorro/inversión) con un 39,4%. En esta lista, y aunque no se consideran como ahorro finalista a la jubilación, aparecen también las Cuentas de Ahorro/depósito (32,7%) y los Fondos de Inversión y Acciones (26,8%).
Por otra parte, en la encuesta también se refleja que el 41% de los encuestados confirmó no tener contratado ningún seguro de vida para cubrir las necesidades económicas que surgen en caso de fallecimiento o invalidez. Una cifra inferior a los que no tienen planes de ahorro, pero que sin duda refleja la descobertura que tenemos para estos casos.
Una implementación necesaria pero aún frenada
Los datos recogidos por este Barómetro también nos permiten obtener una instantánea objetiva de la visión y opinión de los empleados españoles sobre el sistema público de pensiones y, por tanto, sobre el futuro de su jubilación y su posible situación económica llegado el momento. Así, el 64,5% de los encuestados considera que, para mantener su nivel de ingresos tras la jubilación, será necesario complementar la pensión de jubilación con un seguro de ahorro privado y el 89,5% reconoce que sus ingresos se verán afectados si se limitan exclusivamente a la prestación pública.
Y es que, a pesar de que cada vez existe una mayor concienciación por la necesidad de un complemento a la jubilación, sigue habiendo frenos a su contratación. Así, entre los que no tienen ningún producto de ahorro contratado, el 35% apunta a una falta de planificación como principal motivo para no dar el paso. También mencionan la carencia de recursos económicos (27,3%) y la lejanía temporal (16%) como razones a la no contratación de productos de ahorro complementarios a la pensión pública.
“Parece que, en general, los españoles perciben la necesidad de contar con algún sistema que complemente su jubilación en pro de mantener su nivel de vida llegado el momento. Sin embargo, no terminan de decidirse por motivos como la falta de información por parte de las propias empresas y del Estado o la carencia de adecuados incentivos fiscales para la contratación de productos de ahorro” explica Juan Marina, director de Nationale-Nederlanden Employee Benefits, la división de negocios especializada en soluciones retributivas y de protección para empleados y directivos.
Unos productos bien valorados pero desconocidos
Por otra parte, aunque no muy instaurados, el estudio permite destacar la buena imagen de los sistemas de previsión social empresarial entre los empleados. Así, cuando se pregunta por ellos directamente, el 72% de ellos les otorga una valoración positiva y para el 70,4% de los encuestados son un factor a considerar a la hora de elegir trabajo.
Entre los empleados que ya tienen un plan de ahorro a través de su empresa, los que disfrutan de un seguro de ahorro colectivo son los que se declaran más satisfechos (69,3%), seguidos de los que tienen un Plan de Previsión Social Empresarial (55,6%) y de los que participan de un Plan de Pensiones de Empleo (48,5%).
Sin embargo, los resultados del estudio demuestran que los beneficios de estos planes de ahorro son muy poco conocidos por los empleados ya que el 87,5% de ellos admite no saber cuáles son las ventajas de estos productos. Entre los que sí los conocen, destacan los beneficios fiscales, el hecho de que las aportaciones las puede hacer la propia empresa y también que es un buen complemento para la jubilación pública. Siguiendo con la falta de información, señalar que el 65% de los encuestados demandan tanto de sus empresas como del Estado una mayor información de la situación financiera a la jubilación.
Algo llamativo es que, a pesar de este desconocimiento y falta de información sobre los sistemas de previsión social, la predisposición de los empleados españoles por su contratación a futuro es notable. Así, el 42,1 estaría altamente dispuesto a contratar un sistema de ahorro si su empresa se lo propusiese.
El papel primordial de las empresas
Si los empleados parecen estar dispuestos a “hacer los deberes”, estos miran a la empresa para que haga lo propio y asuman un papel fundamental tanto en la formación financiera como en la puesta en marcha de un sistema de ahorro complementario a su pensión. Sin embargo, a la luz de los resultados de la investigación, parece que los encuestados no aprecian ese ejercicio por parte de sus compañías y queda patente que su percepción sobre el compromiso de las empresas con los Planes de Ahorro es muy reducida, ya que el 75% de los encuestados lo considera bajo o muy bajo. Y tampoco son muy optimistas ya que el 67,3% opina que la implicación de su empresa no cambiará a futuro o que incluso irá a peor (19%). Y todo ello a pesar de que más de la mitad de los trabajadores considera que es responsabilidad de la empresa el contribuir a la previsión a la jubilación de sus trabajadores.
“Desde Nationale-Nederlanden Employee Benefits, queremos poner el foco en la necesidad de que las empresas de nuestro país se impliquen en esta situación. Como motor económico, tienen una gran capacidad para impulsar propuestas que ayuden a asegurar el futuro financiero de los españoles. El fomento del ahorro privado como complemento a la jubilación es una de las herramientas más efectivas para ello, al tiempo que ofrece beneficios fiscales tanto para las empresas como para los empleados”, concluye Juan Marina.
La actualización del estudio sociológico “Barómetro de Previsión Social Empresarial” de Nationale-Nederlanden ha partido del análisis de 2.386 encuestas a empleados/as con contrato indefinido en empresas ubicadas en España. Para ello se empleó la metodología CAWI a través de la realización de cuestionarios en línea de 10 minutos de duración en todo el territorio nacional (excepto Ceuta y Melilla), entre el 8 de junio y el 25 de junio de 2018. El estudio presenta un error muestral de ±2% para un nivel de confianza del 95,5% en las condiciones más desfavorables y para datos globales de la muestra, habiéndose ponderado los datos posteriormente en función del número de empresas por CCAA y los tamaños de empresas (de 1 a 100, de 100 a 249 y de más de 250 empleados), para que la muestra represente el total nacional y se adecue a la distribución de empleados/as existentes en cada CCAA.
Los comentarios están cerrados.