Da igual que estés en la playa, en la montaña, visitando nuevas y exóticas ciudades o, simplemente, relajadamente en tu piscina tomando el sol. Lo importante es que durante tus vacaciones, consigas desconectar y olvidarte por unos días de los emails, las llamadas, las reuniones, o el papeleo. Hay que despejar la mente y cargar pilas.
Y relacionado con esto hay que hablar del móvil, un elemento casi imprescindible en nuestro día a día y que es el culpable de que no podamos dejar a un lado la vida laboral todo lo que nos gustaría, y es que apagar el móvil y desconectar hasta la vuelta de vacaciones se ha convertido en un gesto difícil de realizar por parte de muchos trabajadores.
Según la consultora PageGroup, a pesar de que la desconexión digital es un factor que se va implantando poco a poco en las compañías, personas y organizaciones todavía tienen que tomar una mayor conciencia acerca de la necesidad de desconexión durante los periodos vacacionales.
La llegada del verano, en muchas ocasiones, viene acompañada de cierta sensación de estrés para muchos profesionales, ya que dejar atrás todo el trabajo del año no siempre es algo sencillo de realizar. No ser capaces de desconectar acaba repercutiendo de forma negativa en las operativas diarias.
Tal y como afirman desde PageGroup, »la no desconexión disminuye la productividad de los trabajadores, ya que no son capaces de olvidar sus tareas y el estrés que se genera no permite trabajar con normalidad. Por tanto, es responsabilidad de todos educarnos unos a otros para que, fuera del horario laboral, no contestemos emails ni llamadas».
Hoy en día, la tecnología aporta muchas ventajas en el ámbito laboral, ya que permite conectarse desde cualquier lugar y a cualquier hora. Sin embargo, también hay que tener en cuenta la otra cara de la moneda, es decir, la excesiva vinculación al trabajo durante las horas libres.
En esta línea y, para dejar la oficina y poder despreocuparnos, es necesario llevar a cabo una serie de pequeñas acciones que ayudarán a cualquier profesional a alcanzar la tan necesaria desconexión digital y, así, poder lograr el descanso vacacional merecido:
1. Cerrar tareas pendientes antes de marcharse de vacaciones: Dejar algo inacabado puede desencadenar cierta ansiedad, lo que evitará la desconexión. Por eso es necesario llevar a cabo una buena organización previa de las tareas y proyectos, pensando en esas semanas de ausencia.
2. Delegar temas urgentes: En el caso de tareas inaplazables, poder delegar en una persona de back up que genere confianza y sea autosuficiente será fundamental para la tranquilidad del profesional. Asimismo, dejar informados a superiores y responsables de área de este tipo de procesos ayudará a aportar una mayor tranquilidad.
3. Dejar los dispositivos tecnológicos de forma paulatina: Se recomienda coger un mínimo de 15 días de vacaciones para poder alcanzar la desconexión y, en este sentido, se debe realizar una desconexión tecnológica paulatina. Así, los primeros días será necesario estar más pendiente de lo que ocurre en la oficina para mayor tranquilidad del profesional.
4. Fijar una hora al día para revisar temas: Si por las características del trabajo o cargo el profesional no puede desconectar de forma absoluta de los temas laborales, se recomienda fijar una hora concreta y diaria de lunes a viernes para consultar el correo electrónico. No hay que olvidar que incluso de vacaciones, el sábado y el domingo son para descansar.
5. Dejar los ordenadores y smartphones en casa: Fuera de ese horario establecido, los dispositivos deberían estar apagados y en casa. Nunca llevarlos encima para evitar tentaciones y así poder disfrutar de la familia y el tiempo libre.
Por su parte, aquellos empleados que se deben quedar trabajando durante el verano, ven en el tiempo su mayor beneficio. En esta línea, la jornada reducida y la posibilidad de teletrabajar son dos de los factores más valorados.
Los comentarios están cerrados.