El éxito de los emprendedores, más allá de la paciencia y perseverancia que tengan, radica en su desarrollo personal. Es por ello que el branding personal forma parte de los elementos estratégicos de un negocio, ya que el fundador o director es la proyección directa de la empresa y su marca abre camino a los públicos clave.
Antes de definir los objetivos y metas corporativas, es importante conocer los propósitos personales para mantenerlos alineados. La marca personal no es nada más que el reflejo de valores, habilidades y gustos, y eso mismo se debe trasmitir en la imagen de la empresa. Con base en ello, Printero, la primera imprenta online en México, brinda 5 herramientas clave en la construcción del branding personal para emprendedores.
Storytelling
El contar historias, especialmente emprendedoras, es algo que atrae la atención de clientes e inversionistas, y que resulta fundamental para la construcción del branding del emprendedor al relatar quién eres y qué hace tu empresa. La conexión que crea una historia bien contada se debe a diversos aspectos sensoriales y emotivos, por esta razón es importante que parte del discurso que se dé esté enfocado a las metas y sueños que se tienen, sin dejar de mencionar los retos a los que se han enfrentado en el camino del emprendimiento.
Materiales impresos
La tarjeta de presentación y las hojas membretadas con los datos de contacto, sirven para generar un primer impacto visual de la marca personal, y al mismo tiempo se refuerza de manera física al haber un elemento tangible, que, dependiendo del diseño y el material, resultan elementos atractivos para los públicos. En todo material impreso siempre se busca reflejar valores, ideales y personalidad, los cuales deben de ir de la mano con lo que se comunique en el de storytelling para reforzar los mensajes que se quieren transmitir.
Presencia profesional
La primera imagen que se proyecta a los diversos públicos muchas veces comienza desde el físico. Con base en esta premisa es importante hacer un análisis personal y un análisis situacional, para estar preparado de acuerdo a la ocasión que se presente y saber cómo vestir, el tipo de peinado, de corbata, de zapatos, e incluso el lenguaje a utilizar, ya que no es lo mismo una reunión con clientes que una con proveedores.
Redes sociales
Las redes sociales, como Facebook, Twitter y Linkedin se han convertido en herramientas para potenciar la imagen personal. Para lograrlo es fundamental tener actualizados los perfiles mediante una rutina de publicaciones en las cuales se destaquen principalmente la visión y misión propias. Se recomienda tener un estilo uniforme de publicaciones, compartir contenido relacionado al nicho de negocios al que se pertenece y mostrar una imagen de confianza a los seguidores. Es importante no dejarlo todo en las redes y cruzar las barreras online para crear verdaderos vínculos.
Networking
Un emprendedor siempre busca la forma de obtener más contactos que pueden hacer crecer su negocio de diversas formas, y una buena práctica para conseguirlo es mediante el networking, el cual se hace con el intercambio de experiencias, conocimiento y opiniones en fiestas, reuniones, eventos y charlas. La principal ventaja de este ejercicio es el posicionamiento y presencia personal para conseguir nuevos clientes, proveedores, inversionistas e incluso hasta para evaluar la competencia.
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