El secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CC.OO., Carlos Bravo, ha criticado que se utilizase un préstamo de más de 10.000 millones de euros para hacer frente a la paga extra de verano de los pensionistas y ha pedido al Gobierno que estas ayudas financieras desaparezcan del balance de la Seguridad Social «cuanto antes», ya que es «una fórmula de apunte contable inapropiada».
Así lo ha señalado Bravo tras la reunión que interlocutores sociales han mantenido con el Gobierno en la Comisión de Seguimiento del Fondo de Reserva, donde también ha lamentado que aún no se hayan puesto en marcha medidas concretas para mejorar los ingresos del sistema, pese a que en el mes de julio las pensiones han supuesto un gasto de 9.500 millones de euros, 3.514 millones procedían del Fondo de Reserva y 5.986 millones del préstamo.
Para Bravo, el hecho de usar un préstamo puede trasladar a la opinión pública un mensaje de «incertidumbre» sobre la garantía de las pensiones públicas, que «en ningún caso corresponde con la realidad».
Por otro lado, el representante del sindicato en la Comisión también ha reprobado que los Presupuestos para 2017 hayan incluido la suspensión de los límites de utilización que prevé la ley del Fondo de Reserva para este ejercicio y para el de 2018, mientras que no se adoptan medidas «concretas» para incrementar los ingresos del sistema.
En esta línea, Bravo ha recordado que CC.OO. ya presentó una amplia batería de medidas «concretas» para aumentar los ingresos del sistema y ha lamentado la tardanza para alcanzar un acuerdo sobre las mismas, que arrastra tanto esta mesa de diálogo social como el propio Pacto de Toledo.
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