UGT pide que haya un cambio político «bajo el paraguas» del diálogo social en 2017, que sea «inherente a los procesos consensuales que celebrarán las tres fuerzas políticas españolas» o a la posibilidad de que haya unas nuevas elecciones en mayo.
En un comunicado en el que el sindicato hace balance del 2016 y recomendaciones para 2017, ha recordado que este nuevo año debe ser de recuperación de los derechos de las personas y de consolidación de los mismos.
Además, ha subrayado que se tiene que fortalecer el diálogo social «a todo los niveles» para fomentar un modelo de cohesión económica y social «que garantice el Estado de Bienestar español».
Respecto a los salarios, el sindicato considera que el aumento de los salarios para 2017 en el marco de la negociación colectiva debe estar entre el 1,8% y el 3% para que se fomente el consumo y la inversión.
Así, cree que esta es la medida para poner fin a la política de moderación salarial, compensar la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido los trabajadores por las políticas que se han aplicado desde 2010, reducir las desigualdades y fomentar la creación de empleo estable y con derechos.
La aprobación de un plan de choque por el empleo y la sostenibilidad social, que genere empleo de calidad y con derechos y acabe con el uso «fraudulento» de empleos temporales y precarios, es otra de las medidas «claves» que propone UGT para el próximo año.
Asimismo, el sindicato apuesta por que 2017 traiga consigo una revalorización de las pensiones del 1,2%, porque «el 0,25% aprobado por el Gobierno en Consejo de Ministros es totalmente insuficiente y condena a los pensionistas a perder dinero un año más».
EL SALARIO MÍNIMO EN 800 EUROS
Respecto al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), UGT ha pedido que se revalorice en el marco del diálogo social hasta los 800 euros en 2017 y al 60% del salario medio en cuatro años, ya que considera que la subida de los 707,6 euros para el próximo año es «positiva pero insuficiente».
El fortalecimiento del Pacto de Toledo y la aprobación en el Parlamento de una prestación de ingresos mínimos deben ser otras de las medidas esenciales a realizar en 2017, según el sindicato, que considera que este año «en definitiva» tiene que ser el del «rescate de las personas, tras ocho años de profunda crisis social y laboral».
En este contexto, ha recordado que UGT no dudará en acudir a la movilización y la negociación para conseguirlo. Sobre 2016, UGT ha subrayado que a pesar de que España ha sufrido una parálisis política, esta «no ha afectado significativamente a la actividad económica».
«El crecimiento económico que se inició en el cuarto trimestre de 2013 ha mantenido la tendencia durante todo el 2016», ha añadido el sindicato. Asimismo, ha afirmado que «ha quedado en evidencia» que las causas que han propiciado esta tendencia «positiva» eran externas a las acciones del Ejecutivo.
CONSENSOS BÁSICOS MÁS ALLÁ DE UNA LEGISLATURA
Además, cree que también han quedado en evidencia los intereses políticos subyacentes a los mensajes «catastrofistas» promovidos por los sectores empresariales y financieros.
No obstante, para UGT, la gran consecuencia se este «bloqueo político» se ha dado en una «censura clara de los ciudadanos al autoritarismo político y la regresión social practicados por el Gobierno del PP desde 2012».
Sobre los recortes sociales y económicos, el sindicato ha recalcado que «estos vienen de atrás» y que la reforma laboral de febrero de 2012 ha sido la encargada de impulsar la devaluación salarial y de las condiciones de trabajo.
Por último, el sindicato ha puesto de relieve que se deberían de llegar a una serie de consensos básicos que vayan más allá de una legislatura y que recojan soluciones «urgentes y eficaces» a los problemas de la ciudadanía.
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