Xavi Pirla, conferenciante, formador y experto en PNL, expone que se puede trabajar el miedo al rechazo para vencerlo, al igual que se puede vencer otros obstáculos. Para ello, recurre a la PNL como conjunto de herramientas para ayudar a superar estos miedos. Quién más o quién menos ha vivido alguna experiencia donde el miedo al fracaso ha condicionado alguna decisión importante en su vida.
El miedo al rechazo es lo que en muchas ocasiones impide a alguien dar el paso, a pesar de ser uno de los miedos más poco útiles, ya que básicamente no protege de ningún peligro importante. El objetivo de la mayoría de las personas es gustar a los demás y ser aceptado, especialmente porque la impresión que una persona cree que genera en los demás acaba siendo una referencia que utiliza para alimentar su autoimagen, y por lo tanto su autoestima.
Según Xavi Pirla, la trampa está en confundir la opinión que tienen los demás de uno mismo con lo que uno es realmente. Si alguien es lo que cree leer en los demás sobre lo que opinan de él, luego depende de ello y actúa condicionado para generar el mayor impacto positivo o para minimizar el negativo.
La PNL aborda el tema de cómo trabajar el miedo al rechazo de varios modos:
1. Abordar las creencias de la persona, y ayudarla a entender qué es quien es, independientemente de lo que crean los demás. Especialmente, porque cada persona tiene un modo diferente de ver la realidad y gustar a todo el mundo es una tarea casi imposible.
2. Tratar el tema del miedo. El miedo es una respuesta en tiempo real a la percepción de una amenaza inmediata. A pesar de eso, las personas tenemos miedo de lo que va a suceder. Esto es debido al poder de la imaginación (conjunto de representaciones mentales según la PNL), que genera los escenarios más aterradores, pero la pregunta es: cómo sabemos que lo que nos imaginamos sucederá.
La PNL explica que hasta que uno no es consciente de la calidad de sus representaciones mentales, no puede cambiarlas, y la propia PNL da una gran cantidad de herramientas para que uno pueda generar pensamientos útiles que, a su vez, promuevan el comportamiento que uno quiere.
La autoestima está más relacionada con la imagen interna que uno tiene de si mismo, que no con lo que digan los demás, y la PNL ayuda a cambiar tanto la imagen interna como la imagen que perciben los demás de uno mismo.
El miedo al ridículo no deja de ser el miedo a lo que puedan pensar de uno mismo, y por eso es importante aprender a dejar de pensar en eso para aprovechar todas las oportunidades sin el miedo al rechazo y así conseguir los objetivos. La finalidad de la PNL, en estos casos, es aprender que es mejor despejar cualquier duda y disfrutar de la libertad de ser uno mismo.
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