Un total de 47 trabajadores de la embotelladora de Coca-Cola en Fuenlabrada se han reincorporado este lunes a las 06:00 horas a sus puestos de trabajo, en cumplimiento de la sentencia que declaró nulo el ERE que la empresa había aplicado sobre la totalidad de la plantilla.
Con alegría contenida, ya que se trata de una «incorporación laboral provisional», los trabajadores han accedido a la factoría tras 20 meses de lucha. Este lunes están llamados a incorporarse 85 empleados en los dos turnos de trabajo.
Un portavoz sindical de CCOO, Juan Carlos Asenjo, ha declarado a Europa Press que se trata de un día «agridulce» porque aunque quedan otros 130 trabajadores por ser llamados a sus puestos, se ha logrado que vuelva a abrir sus puertas una «empresa que iba a ser desmantelada».
El alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles (PSOE), ha acudido a las puertas de la factoría para escenificar su apoyo a los empleados. Mientras, en el campamento de la ‘esperanza’ habilitado a varios metros, en otra de las puertas de acceso a la empresa, el resto de compañeros se mostraban satisfechos con las incorporaciones.
En este sentido, Sergio Fernández, un trabajador que se incorpora en el turno de tarde, ha manifestado a Europa Press que se trata de «una incorporación provisional e irregular porque se tiene que pronunciar la Audiencia sobre si la valida o no».
No obstante, y aunque ha asegurado que hay «confianza» entre los trabajadores «después de seis sentencias ganadas», ha reclamado que el objetivo es que se puedan incorporar a la fábrica los otros 130 trabajadores de la factoría fuenlabreña.
Cursillos de formación
Tras la entrada del primer turno había cierta incertidumbre ya que se desconocía si los 47 empleados retomarían sus antiguos puestos de trabajo. «Parece que les están dando un cursillo de formación, pero no sabemos nada», ha apuntado un grupo de trabajadores que permanecía en el campamento.
«Confiamos -ha agregado Sergio Fernández- en que la fábrica se ponga al final en marcha y volvamos a nuestros puestos de trabajo».
En este sentido, Asenjo ha manifestado que los trabajadores deberán incorporarse a las funciones que desarrollaban antes de que, en enero del pasado año, la empresa decidiese aplicar el ERE. «Volverán a sus puestos, es una cuestión de tiempo», ha precisado.
Según los trabajadores, la factoría no ha sido desmantelada, y las secciones que se han desmontando pueden volver a montarse sin problemas. «Es cuestión de tiempo y de ganas de la empresa de acatar lo que dice la Justicia», ha apostillado el trabajador.
Al campamento del que cuelga un cartel recordando los 593 días de «lucha» ha acudido la portavoz de IU y concejala de Fuenlabrada, Teresa Fernández, quien se ha mostrado «convencida» de que, finalmente, la lucha dará resultados y las instalaciones fuenlabreñas comenzarán a producir en «breve».
«Esto demuestra que la lucha y unión de los trabajadores consigue derrotar a grandes multinacionales», ha subrayado.
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