Cuatro de los detenidos son de nacionalidad marroquí con edades comprendidas entre los 33 y los 49 años, y dos de Ecuador e Italia, de 42 y 48 años de edad, respectivamente.
La primera de las intervenciones se llevó a cabo en una discoteca clandestina situada en Alcantarilla, sin rotulación exterior y sin ningún tipo de licencia administrativa y sanitaria para ejercer su actividad.
En dicho local se llegaba a aforos clientelares superiores a las 100 personas con el riesgo que ello supone para la integridad física.
Debido a esta situación de clandestinidad el responsable del local se proveía de trabajadores sin darlos de alta en el régimen de la seguridad social y aprovechándose del estado de necesidad de los mismos, al encontrarse la mayoría en situación irregular en territorio español.
Seguidamente, la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental (UCRIF) llevó a cabo una inspección en varios obradores de pan de la ciudad de Lorca regentados por ciudadanos magrebíes que se encontraban explotando laboralmente a otros ciudadanos extranjeros en situación irregular en España.
La mayoría de los trabajadores, algunos de los cuales dormían sobre el suelo de una de las habitaciones de la panadería, no tenían contrato ni estaban dados de alta en la Seguridad Social.
Dadas las condiciones de insalubridad de los obradores de pan, así como la falta de licencia para el desempeño de tal actividad, la Policía Local de Lorca levantó las correspondientes actas y se solicitó a la Consejería de Sanidad y Política Social la paralización cautelar de estos locales.
La última operación llevada a cabo por parte de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras ha tenido lugar en una empresa agrícola situada en Santa Cruz (Murcia) donde se empleaba a ciudadanos extranjeros, aprovechándose de su situación personal y administrativa y haciéndoles trabajar en condiciones precarias.
Del sueldo les era descontado los gastos de transporte desde su lugar de recogida hasta el punto de explotación y los propios trabajadores debían sufragar el gasto de herramientas y utensilios necesarios para llevar a cabo su labor.
En estas tres operaciones han quedado intervenidas sustancias estupefacientes, armas prohibidas, numerosa documentación y dos vehículos.
Estas operaciones han sido llevadas a cabo por la UCRIF-Trata de Seres Humanos, de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía de Murcia contando con la asistencia de la Unidad de Prevención y Reacción y Guías Caninos de la Policía Nacional, con Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Murcia, colaboración de las Policías Locales de Alcantarilla y Lorca y la Consejería de Sanidad y Política Social.
Los comentarios están cerrados.