ASEMPLEO y su visión de los datos del paro

RRHH Digital ASEMPLEO, la mayor asociación de agencias privadas de empleo, señala que “Los datos de paro registrado y afiliación correspondientes al mes de julio, son positivos, y muestran claramente el freno en el deterioro del mercado laboral. El paro se ha reducido en 64.886 personas, lo que supone un 1,36% menos que en junio pasado, y un 2,43% más que en el mismo mes del año anterior. Esta última cifra, es la menor subida interanual de paro registrado en un mes de julio desde el inicio de la crisis, en 2007. No obstante, el número de desempleados se incrementa en más de 111 mil respecto al mismo mes del año anterior. Igualmente, la afiliación sube, aunque de nuevo en menor medida que la caída del paro registrado. En el mes de julio, la afiliación a la Seguridad Social aumentó en 32.890 personas respecto a junio de este año. Sin embargo, respecto a julio del pasado año, la afiliación cae al ritmo de -3,56%, lo que suponen 605.983 empleos menos que el pasado julio de 2012. Estos ritmos, tanto de caída interanual de la afiliación como de subida del paro se asemejan a los del periodo 2001-2011, cuando estábamos abandonando la primera recesión, en la que volvimos a entrar en la segunda mitad de 2011, aunque la afiliación sigue cayendo a ritmos superiores a los alcanzados en dicho período.

El desempleo desciende en todos los colectivos salvo en aquellos “sin empleo anterior”, lo que puede estar indicando, por un lado, que dado el periodo favorable para el empleo, hay más personas que se animan a buscar activamente un empleo, y por el otro, que la situación de las familias en nuestro país es muy delicada, y aquellas personas que no habían tenido la necesidad de trabajar hasta ahora (especialmente los jóvenes…) tienen que salir al mercado laboral para tratar de aportar a las cuentas familiares.

El empleo aumenta en los sectores especialmente vinculados a la temporada de verano. Si descontamos el factor estacional, todavía se aprecia que el paro aumenta (7.591 parados más) y disminuye el empleo (-57.505 efectivos), por lo que no se puede afirmar, todavía, que asistamos a una recuperación evidente. No se puede negar que los ritmos de deterioro laboral se frenan con contundencia, lo que es positivo, pero hay que seguir trabajando para mejorar mes a mes estos registros, hasta que podamos estar hablando del ansiado fin de la recesión laboral.

Los contratos descienden un 1,27% respecto al mismo mes del año anterior. La caída ha sido especialmente intensa entre los contratos de carácter indefinido, que se reducen casi a la mitad (-58,20%) respecto a julio de 2012.   Nuevamente, es destacable que más del 90% de las contrataciones realizadas este mes, hayan sido contratos temporales. Ante la incertidumbre económica que todavía vivimos, lo empresarios siguen apostando por el contrato temporal como vía para de flexibilidad para adaptarse a la volátil situación económica española. En un entorno como el actual, en el que la contratación temporal corre el riesgo de  precarizarse, deben hacerse esfuerzos por recuperar la contratación permanente. El camino para llegar a la estabilidad en el empleo pasa por mejorar el ciclo: contratación temporal, desempleo, reciclaje, rotación y vuelta a la contratación temporal. El éxito de este ciclo es llegar a la contratación indefinida, y si se maximiza la intervención de la ETT, se conseguirá reducir tanto el número de ciclos como su duración. Especialmente en este momento en el que se quiere que las ETT colaboren con los Servicios Públicos de Empleo para poner en funcionamiento los planes de empleo, éstas deben gozar del  reconocimiento social, ser valoradas como verdaderas herramientas de flexibilidad externa de las empresas y convertirse en la pieza clave de la profesionalización del empleo. Toda medida que facilite que la contratación temporal se realice a través de ETT beneficiará al Estado, la eficiencia de las empresas, el acceso al mercado laboral de los desempleados, y posibilitará además reforzar el papel de las ETT como Agencias de Colocación”. 

ASEMPLEO concluye: “En resumen, los datos de paro registrado y afiliación de julio apuntalan, no sin matices, la reducción del deterioro laboral en nuestro país, pero también indican que la recuperación laboral que, junto a otros factores coadyuvantes necesarios, pueda darse en los próximos meses o trimestres estará dominada por unas características de precariedad que requerirán de políticas eficaces de acompañamiento, para limitar los daños de la precariedad y facilitar la transición hacia una recuperación laboral de mayor calidad en cuanto ello sea posible”.