Recursos Humanos Digital Los sindicatos mayoritarios de Vodafone –UGT y CC.OO.– han exigido a la filial española del grupo que busque otras alternativas de ahorro de costes que no «pasen» por el despido de 900 trabajadores, tal y como recoge el Expediente de Regulación de Empleo presentado este martes por la compañía.
De esta forma, UGT y CC.OO. han rechazado frontalmente que empresas con beneficios, como Vodafone, puedan despedir trabajadores. «En Vodafone sólo están buscando la destrucción de puestos de trabajo como la medida más sencilla, y la única, para el ahorro de costes sin aportar un plan de viabilidad que contemple otras opciones que salvaguarden el empleo o, en el peor de los casos, lo posicionen como última opción de todas las existentes», han afirmado.
UGT y CC.OO. han señalado que defienden el empleo como «pilar básico» en el proceso de negociación con Vodafone, por lo que se niegan a asumir la «masiva» destrucción de empleo como «única» forma de compensar la pérdida de beneficios por parte de la empresa.
Los sindicatos han puntualizado que con anterioridad han demostrado su «responsabilidad», llegando a acuerdos para la adopción de medidas que, en los últimos años y «aun incidiendo directamente» sobre los trabajadores, han servido para mantener el volumen de empleo en la multinacional.
Asimismo, los representantes de los trabajadores han recordado que Vodafone obtuvo unos ingresos de 2.319 millones de euros en el primer semestre de su ejercicio fiscal, que comprende del 1 de abril al 30 de septiembre, a pesar de experimentar una «cierta» reducción de beneficios.
De esta forma, los sindicatos han aludido a los acuerdos laborales alcanzados con el anterior consejero delegado, Shameel Joosub, sustituido por Antonio Coimbra, que asumió su cargo el pasado mes de septiembre, como la reducción de un 10% del pago de incentivos y, también, la aplicación de un ERTE de quince días para el total de la plantilla.
«Todo lo cual supuso un importante sacrificio para los trabajadores, que se cargó a las arcas del Estado y que no afectó a los directivos de la compañía, una élite con las remuneraciones más elevadas del mercado», han aseverado.
CAMBIO DE DIRECCIÓN
Además, los sindicatos han añadido que la llegada del nuevo consejero delegado de Vodafone España, Antonio Coimbra, ha supuesto la ruptura del «equilibrio» que en la compañía se había mantenido con la apuesta por el empleo.
De forma «sorpresiva e inmotivada», Vodafone quiere llevar a cabo un ERE que afectará afectar al 21% de su plantilla en España, con una media de edad inferior a los 40 años, lo que se traduce en un «montón de familias» abocadas al paro, han afirmado.
Esa es la política de esta nueva dirección, que ya dejó entrever su talante cuando denunció el pasado mes de noviembre el convenio colectivo con el claro objetivo de rebajar las condiciones laborales de la plantilla», han denunciado.
POLÍTICA «CONSISTENTE»
En este sentido, fuentes de la compañía han señalado a Europa Press que la actual política del consejero delegado de la filial española es «consistente» con la que ha venido manteniendo la multinacional en los últimos años.
Las fuentes han manifestado su «sorpresa» ante las declaraciones de los sindicatos respecto a Coimbra y han puntualizado que la decisión de la operadora de presentar un ERE responde a la actual situación del sector, afectado por una caída de los ingresos, y no a cambios en la dirección de la filial española de Vodafone.
La firma indicó ayer en un comunicado que es necesario adecuar la dimensión de la compañía a la nueva realidad del sector de telecomunicaciones en España y al entorno económico actual caracterizado por la caída del negocio tradicional -voz y mensajería-, la alta competencia y la presión regulatoria. En el caso de Vodafone, estas circunstancias han supuesto una pérdida de ingresos superior al 30% en los últimos cuatro años.
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