Iberia convoca al Sepla para el 2 de enero para negociar el plan de reestructuración

RRHH Digital  Iberia ha convocado al sindicato Sepla para el próximo miércoles, 2 de enero, con el fin de sentarse a negociar el plan de reestructuración, conocido como ‘Plan de Transformación 2013-2015’, que la aerolínea planteó en noviembre como consecuencia de la «crítica situación económica» en la que se encuentra.

   El plan de reestructuración inicial de Iberia contempla el despido de 4.500 trabajadores (el 23% de la plantilla), de ellos unos 537 pilotos de los 1.500 actuales. Además, incluía una rebaja media salarial de entre el 35% y el 35%, respecto al convenio actual, para los trabajadores que se queden en la aerolínea en 2015.

   Concretamente, la aerolínea ha citado al Sepla para los días 2, 3 y 4 de enero en la sede de la aerolínea en Madrid, según la carta enviada al jefe sindical del Sepla en Iberia, Justo Peral, firmada por el director de Recursos Humanos de Iberia, José Luis Romero.

   Iberia confía en que el sindicato de pilotos rectifique su actitud y se avenga a negociar el plan de reestructuración de la empresa, «imprescindible» para resolver sus problemas de competitivdad, tal y como están haciendo ya los representantes del 93% de la plantilla, y a plasmar sus propuestas en la mesa de negociación.

    En la carta, Iberia insta al sindicato de pilotos a que se siente para iniciar una negociación de «forma urgente y permanente, dada la delicada situación económica» de la compañía, que debe dar solución a sus problemas de competitividad.

   Iberia recuerda al Sepla que una vez emitido el nuevo laudo de Jaime Montalvo –que ambas partes se encuentran analizando–, el argumento esgrimido por los pilotos de esperar a conocer el marco jurídico aplicable al colectivo para iniciar la negociación no se sostiene.

   «El propio árbitro manifiesta en el laudo que éste debe ser «un punto de partida más que de final de llegada» y que «dadas las difíciles circunstancias económicas y organizativas que afectan a la empresa y la complejidad del proceso, el plan de reconversión debe abordarse a partir de ahora en la negociación de las partes implicadas», señala Iberia en la misiva.

    Según el nuevo laudo, en vigor hasta finales de 2014, los nuevos pilotos que se incorporen en Iberia tendrán una reducción salarial del 40% de media, se congelarán los salarios de los actuales, y se vinculará los incrementos salariales para los años 2013 y 2014 al Ebit de la compañía. Asimismo, se mantiene el escalafón único para las dos compañías y limitará la capacidad de Express al 25% de la oferta de su matriz.

URGE AL SEPLA A NEGOCIAR «SIN DEMORA»

    En su dictamen, Montalvo apuntaba que el laudo no representa un impedimento «para negociar nuevas condiciones de trabajo», sobre todo, para obtener mejoras de productividad y que la negociación «como la mejor vía de abordar y definir el futuro» en la compañía.

    En cuanto al proceso de negociación en marcha, al que Iberia espera se sume el Sepla, la aerolínea señaló que el árbitro contempla que «en la adecuada valoración, judicial y administrativa, de determinadas circunstancias económicas, los contenidos del laudo, materialmente negociables, son susceptibles de quedar afectados por procedimientos de inaplicación o modificación, en los términos previstos en nuestro ordenamiento jurídico».

    Por ello, Iberia urge al Sepla a iniciar el proceso de negociación «sin demora» y a «discutir las propuestas sobre salarios y productividad» que el sindicato ha difundido en los medios de comunicación.

    «Ello debería hacerse sin condicionamientos previos de ningún tipo por ninguna de las partes, bajo el mismo marco de negociación establecido y acordado con los representantes del resto de los colectivos de la empresa, y teniendo todos la mejor voluntad y flexibilidad para llegar a acuerdos», concluye la carta.

    El Sepla planteó bajar el sueldo hasta un 51% para nuevas incorporaciones y rebajar en un 59% los costes operativos de las tripulaciones de Iberia (pilotos y copilotos) en corto y medio radio, además de una rebaja salarial del 10% y medidas para mejorar la productividad de un 10% para todo el colectivo, medidas todas ellas vinculadas a la presentación por parte de Iberia de «un plan de crecimiento», principal escollo entre las partes.