Recursos Humanos Digital El Gobierno de Iñigo Urkullu ha logrado aprobar, con los votos de 26 de sus 27 parlamentarios y la abstención de los grupos de la oposición, su primer proyecto de Ley, referente al adelanto de las pagas extras de 2013 para los 67.000 funcionarios vascos. Su portavoz, Josu Erkoreka, ha asegurado que se ha logrado una solución «razonable y equilibrada», con arreglo a la legalidad y «sin incurrir» en incumplimientos de resoluciones judiciales, y además, contribuyendo al crecimiento económico.
De esta forma, el recién constituido Ejecutivo autónomo ha salvado uno de los principales retos que se le han presentado «heredado» de la pasada legislatura, como es la suspensión provisional por parte del Tribunal Constitucional del abono de la extra de Navidad que había ordenado el Gabinete de Patxi López, pese al Decreto Ley del Gobierno del PP por el que se eliminaba esta paga.
Durante su presentación en el Parlamento vasco este viernes por la mañana del proyecto de Ley de Medidas de las Pagas Extras para 2013, Erkoreka ha recordado que el recién constituido Ejecutivo de Urkullu ha presentado esta medida en el Parlamento 10 días después de su creación «y estando en medio las fiestas de Navidad». «En muy pocas ocasiones habrá ocurrido esto porque ha sido un tiempo récord», ha añadido.
En este sentido, ha señalado que este proyecto «tiene por objeto dar respuesta a la delicada y específica, a la muy concreta situación generada en el sector público vasco por el Real Decreto Ley de 13 de julio de 2012 de medidas extraordinarias para garantizar la estabilidad presupuestaria y la resolución adoptada por el Tribunal Constitucional el pasado 11 de diciembre, acordando la suspensión de la decisión adoptada por el Ejecutivo anterior de hacer efectiva la paga extra de los empleados públicos correspondiente al mes de diciembre de 2012».
Josu Erkoreka ha señalado que el PNV «ya tuvo ocasión de manifestar su posición contraria» al Real Decreto Ley del Gobierno de Rajoy, «que se encuentra en el origen de este conflicto», con ocasión de su convalidación en el Congreso de los Diputados.
En este sentido, ha recordado que, cuando era portavoz del Grupo Vasco en la Cámara baja, activó «personalmente el botón del no» a la convalidación de la norma.
Asimismo, se ha referido al TC que «ha hecho valer su fuerza vinculante, por lo menos, ha querido hacerlo así, aunque no sea más que de modo provisional y cautelar, lo que significa que, hasta que el alto Tribunal no diga lo contrario o no ponga fin al procedimiento, pronunciándose sobre el fondo del asunto, la paga correspondiente al mes de diciembre de 2012 no puede ser satisfecha nunca bajo el ropaje de paga extra ni tampoco bajo otro ropaje más o menos original o creativo».
«No tengo ninguna duda de que capacidad creativa tenemos en el Gobierno y también existe en esta Cámara para dotar a esta paga extra de otros ropajes y otros revestimientos, pero el marco normativo y las últimas resoluciones, en concreto, del TC del 11 de diciembre, no deja margen a otra opción», ha añadido.
Según ha explicado, el alto Tribunal «deja taxativamente claro que esta paga extra, con este ropaje o con otro, no es posible ser satisfecho hasta en tanto no haya un pronunciamiento sobre el fondo del asunto por parte del Tribunal Constitucional».
«No puede ser satisfechas sin incurrir en las responsabilidades derivadas del incumplimiento de una resolución judicial», ha apuntado.
En este sentido, ha manifestado que «este proyecto de Ley se aprueba ejecutando competencias ineludibles de la Comunidad Autónoma Vasca», en virtud del Estatuto de Gernika que «da fundamento y base competencial a la aprobación de esta norma» en los artículos que se refieren al régimen jurídico de la función pública, a la organización del sector público vasco y al fomento e impulso de la actividad económica, «sin perjuicio de la ordenación general de la economía».
«El objetivo principal del adelanto de las pagas extras es que la economía vasca y, sobre todo el comercio vasco, tenga un impulso, una promoción, incrementando la demanda del consumidor privado», ha destacado.
SIN COLISIONES
Josu Erkoreka ha asegurado que el proyecto «carece de puntos de colisión con el Real Decreto Ley de 13 de julio, porque las medidas que éste incorpora se refieren exclusivamente al ejercicio presupuestario de 2012», mientras que el proyecto de Ley del Gabinete de Iñigo Urkullu «opera sobre las cuentas públicas de 2013». «Cualquier intento, venga de donde venga, de forzar las cosas para acusarlo de vulnerar esta disposición, está inexorablemente abocada al fracaso», ha aseverado.
El portavoz del Gobierno vasco ha dicho que «el proyecto encierra una estructura muy sencilla», ya que se trata de «un texto de artículo único, que se limita a alterar, con carácter excepcional, y exclusivamente para el ejercicio 2013, el régimen presupuestario de las pagas extras de los empleados públicos».
«No modifica ni su régimen jurídico sustantivo ni su periodicidad. Las pagas extras, según el proyecto de Ley, seguirán siendo dos, seguirán abonándose con una frecuencia semestral, y seguirán teniendo el mismo contenido y cuantía que venían teniendo hasta ahora», ha afirmado.
En su opinión, «la novedad radica en que, en el ejercicio 2013, se abonarán en enero y en julio, en lugar de en junio y en diciembre». «El Gobierno está absolutamente convencido de que, con este proyecto, se da una solución equilibrada y razonable a la situación creada por la resolución del Tribunal Constitucional del pasado 11 de diciembre, conciliando los requerimientos de legalidad con los intereses de las empleados públicos, al tiempo que se persigue contribuir a estimular la demanda privada y, con ello, a promover el crecimiento que necesita la economía vasca», ha indicado.
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