Las políticas de RSC ganan peso en las empresas

RRHH Digital. Las políticas de Responsabilidad Social Corporativa en las empresas están cobrando un gran protagonismo y cada vez son más las compañías que las están incorporando a su filosofía de trabajo.

En RRHH Digital hemos querido conocer la voz de los expertos en la materia. En primer lugar hemos preguntado si ¿Creen que las políticas de RSC en las compañías son necesarias?

Estela López, Responsable de Comunicación Corporativa de Kellog ha subrayado que ‘la Responsabilidad Social Corporativa asegura el avance social y económico de las comunidades y debería formar parte de la filosofía de las compañías. Cada vez más, los consumidores de hoy en día están alineando sus valores con las marcas y empresas que eligen. Además, ha apuntado que “en el caso de Kellogg, nuestro plan de responsabilidad corporativa nos está ayudando a desarrollar productos de manera más sostenible que ofrecen resultados a nuestros consumidores, empleados, comunidades, inversores y nuestro planeta”.

Ramon Porteiro de Dexter indicó que “Creemos que las políticas de RSC son fundamentales y que marcaran un antes y un después respecto a las conductas responsables a nivel corporativo, hasta tal punto que influirán en las políticas de selección de cada organización, tanto por parte de la empresa como de los profesionales.

Enrique Arce socio de PeopleMatters ha destacado que estas políticas son “absolutamente necesarias.  La crisis es una oportunidad para hacer cosas distintas y reputadas socialmente. La sociedad, con el tiempo, no tolerará el crecimiento económico sin la compañía del desarrollo social. De ello ya están encargando las instituciones: ONU, OCDE, OIT, Banco Mundial, etc. Además, “cuando se habla de RSC no solo es acción social hacia fuera. También es responsabilidad social la igualdad de oportunidades, el desarrollo de la empleabilidad de los empleados y las opciones de conciliación cuando la tasa de dependencia de los mayores de 64 crece imparablemente. Aquí también son necesarias las políticas de REC”.

Óscar Massó, Director de Marketing y Comunicación de Sodexo Soluciones de Motivación ha resaltado que “por supuesto, ninguna compañía puede vivir ajena a la sociedad que la rodea y en la que desarrolla su actividad. Las empresas, independientemente de su tamaño o sector, son el motor del desarrollo económico, social y medioambiental de las ciudades y de los países donde operan. Por ello, es imprescindible que los objetivos de productividad y rentabilidad de cualquier compañía caminen de la mano con el respecto a los valores éticos y humanos, no podría ser de otra manera”.

Por último, Javier Rodriguez Baquero, Director General del Grupo Alentis, ha incidido que “sí, sin dudarlo, es necesario que las empresas en su estrategia definan políticas de responsabilidad social, tenemos que generar vínculos de confianza con todos nuestros grupos de interés. Ser capaces de conjugar la actividad empresarial con el desarrollo profesional, social y humano de nuestros trabajadores y trabajadoras, con el respeto por nuestro entorno y aportando un beneficio social, con el fin de contribuir a mejorar y avanzar por el camino de la sostenibilidad”.

La segunda cuestión que pusimos sobre la mesa fue conocer ¿Qué objetivos se ha marcado su empresa en este sentido?

Estela López ha indicado que “para Kellogg, la responsabilidad corporativa es parte de nuestra esencia y así se ha trasmitido generación tras generación. Nuestro fundador, William Keith Kellogg, la incorporó hace más de un siglo con el objetivo de mejorar el bienestar físico y emocional a través de los productos que elaboramos y también con su labor filantrópica. Una cultura basada en la importancia de invertir en las comunidades que le llevó a crear la Fundación W.K. Kellogg en 1930 convirtiéndose 80 años después en una de las mayores fundaciones privadas del mundo concediendo subvenciones por un valor superior a 5.500 millones de dólares. Nuestra empresa y la Fundación comparten misiones filantrópicas similares, y el éxito de ambas entidades está muy ligado”.

Además, ha querido enumerar que “Kellogg ha seguido trabajando en este sentido en cuatro áreas clave comprometiéndonos con:

– los productos y consumidores: Mejorando sus valores nutricionales en sus productos y fomentando hábitos de vida saludables

– con nuestros empleados: Con un lugar de trabajo con gran diversidad, fomentando la conciliación y el desarrollo profesional

– con la comunidad: Contribuyendo con organizaciones benéficas alrededor del mundo y colaborando activamente con bancos de alimentos.

– y con el medio ambiente: Estableciendo objetivos en materia de residuos enviados al vertedero, consumo energético, emisiones de gases efecto invernadero y uso de agua”.

Ramón Porteiro ha subrayado que “como objetivo general nos hemos marcado el trabajar en entorno de responsabilidad social en 2 ámbitos: El medioambiental y el de trabajo constructivo y honesto para la mejora del entorno global. Tenemos un plazo de tres años y lo hemos comenzado en Julio del 2010”.

Enrique Arce ha resaltado que “el desarrollo humano y profesional de los empleados como modo de ganar calidad ciudadana para poder aconsejar a nuestros clientes en sus decisiones de negocio y poder conducir su propia reputación personal”. También quiso indicar que “facilitar opciones de conciliación entre las que caben el voluntariado”.

Por último, Óscar Massó quiso destacar que “en Sodexo, desde su creación en 1966, los valores siempre han sido claves en la organización (espíritu de servicio, de equipo y de progreso). Fruto de este trabajo constante a lo largo de los años, la compañía ha recibido prestigiosos galardones internacionales como reconocimiento a su actividad sostenible y responsable, como el Dow Jones Sustainability Index (DJSI), durante seis años consecutivos, y el “Sustainability Yearbook 2012” elaborado por Sustainable Asset Management (SAM), durante cinco años ininterrumpidos, entre otros”. También incidió que “los objetivos del grupo Sodexo en materia de RSC está recogidos en el Better Tomorrow Plan (BTP), que se asienta sobre tres pilares fundamentales: We Are (somos), donde se establecen los fundamente como empresa responsable; We Do (hacemos), donde se recoge el plan de acción; y We Engage (nos comprometemos), donde se definen las actuaciones con nuestros grupos de interés”.

La tercena pregunta que lanzamos fue conocer ¿Cómo valora las políticas de RSC que se hacen desde las  Administraciones Públicas?

Ramón Porteiro apuntó que “creemos que son mas teóricas que prácticas. No dotan de recursos ni económicos ni en tiempo y la concienciación que se hace desde las Administraciones, tanto interna como externa, tiene muy poco impacto. Realmente lo hacen para mejorar su imagen, pero no creen en ellas como una herramienta ejemplarizante ni de mejora de entorno efectiva”.

Enrique Arce ha destacado que “por el momento son escasas. Las Administraciones deben ser ejemplo de RSC, facilitar consejo, ideas, relaciones, subvenciones, etc., pero no son momentos para la lírica.  Se debería estar más atento a la LISMI y a hacer cumplir la Ley de Igualdad.

Óscar Massó subrayó que “es que su papel es más bien flojo. Su función reguladora es fundamental y sin duda ha fallado en los últimos años, sobre todo en materia de  ética, transparencia y gobierno corporativo”.
Por último, Rodriguez Baquero, analizó la situación comentando que “si partimos que la Administración Pública tiene un papel fundamental en el desarrollo de la responsabilidad social, por su papel regulador, supervisor y sensibilización todas las políticas de actuación son positivas”.

Además, incidió que “el incentivar estas políticas en el ámbito empresarial es aún una  actuación a potenciar y que serviría para consolidar la responsabilidad social corporativa en todos los ámbitos y tipos de las compañías”.

La última cuestión que quisimos conocer de boca de nuestros expertos era conocer ¿qué proyectos de RSC/ Voluntariado están llevando a cabo sus empleados?

Estela López apuntó que “Kellogg fue la primera compañía en contratar nutricionistas para trabajar en la industria de la alimentación, publicar información nutricional en la paquetería en 1930, mejorar sus productos en respuesta a las necesidades de la sociedad, añadir ácido fólico en los productos e imprimir la Cantidad Diaria Orientativa en los paquetes en 2007. En la actualidad, estamos comprometidos con la construcción de una empresa fuerte con marcas que sean apreciadas, a la vez que hacemos lo correcto para nuestro entorno y la sociedad. Durante 2011, Kellogg contribuyó con más de 38 millones de dólares en efectivo y en producto a organizaciones de todo el mundo, incluyendo los programas de desayunos y de ayuda contra el hambre”.

Para terminar resaltó que “en materia de agricultura sostenible, Kellogg es consciente de que gran parte de sus emisiones de carbono y el uso del agua se deriva de la agricultura. Por ello, ha estado trabajando con los agricultores que cultivan sus granos y ha fomentado la sostenibilidad agrícola más allá de su propia cadena de suministro. La mayor parte de nuestros productos como Special K, Rice Krispies y ChocoKrispies, contienen arroz proveniente del Parque Natural del Delta del Ebro y de la Albufera de Valencia, parajes naturales incomparables”.

Ramón Porteiro ha comentado que “por un lado un reciclaje total de nuestros consumibles. Por otro lado, una total honestidad en cuanto a la información que se ofrece al cliente externo, clientes y candidatos. Por último, tenemos un programa de ayuda a una comunidad en desarrollo situada en Panamá, región de Veraguas, donde mantenemos una escuela de indios de la etnia cuna, para su formación e integración social, en colaboración con la orden dominica que tiene allí dos monjas profesoras destacadas.

Enrique Arce resaltó que “cada uno es libre de participar en proyectos. La empresa facilita tiempo si es necesario pero en la actualidad mantener la competitividad es lo que más foco exige”.

Óscar Massó apuntó que “los empleados de Sodexo participan como voluntarios en el programa Stop Hunger. En el marco de este programa, el grupo Sodexo celebra de forma anual el Servathon, que desarrolla iniciativas locales de voluntariado, donaciones, talleres e intercambio de experiencias orientadas a luchar contra el hambre en el mundo. Así, por ejemplo, los empleados de Madrid realizan una jornada lúdica formativa en colaboración con la ONG Aldeas Infantiles en Villalba. Por su parte, en Barcelona, se llevó a cabo una actividad similar en colaboración con la asociación el Casal del Raval”.

Javier Rodríguez Baquero, explicó que “el Grupo Alentis forma parte activa del Grupo de Coordinación de RS de Fundación ONCE, trabajando en otras actuaciones en el desarrollo de un Plan de Voluntariado para todo el Grupo. Actualmente se están valorando diferentes propuestas de actuación para posteriormente desarrollar el proyecto de trabajo y hacer extensible el mismo a todos nuestros empleados”.