RRHH Digital. La Comisión Europea ha propuesto este viernes una ayuda de 1,6 millones de euros del Fondo de Adaptación a la Globalización para apoyar la recolocación de 350 trabajadores del sector del calzado de la Comunidad Valenciana despedidos de 143 pequeñas y medianas empresas como consecuencia de la crisis.
La subvención, solicitada por las autoridades españolas, debe ser aprobada ahora por la Eurocámara y los Gobiernos de los Veintisiete.
La ayuda propuesta tiene por objeto facilitar a los trabajadores asesoramiento y orientación individuales, evaluación de las capacidades y recolocación, tutoría, formación general y reciclaje, formación profesional individual, promoción del emprendimiento y apoyo al mismo, subsidios para la búsqueda de empleo y una contribución a los gastos de desplazamiento. Sumando la aportación nacional, ascenderá a 2,5 millones.
«La creciente competencia mundial en el sector del calzado ha afectado duramente a los trabajadores españoles de este sector», ha dicho el comisario de Empleo, László Andor, en un comunicado. La ayuda europea, ha agregado, «les ayudará a encontrar nuevos empleos formándolos para que adquieran nuevas destrezas».
Los despidos en cuestión, según el análisis de Bruselas, se debieron al aumento de la competencia del calzado producido en otros lugares del mundo, agravado por la crisis económica actual. «China y la India dominan cada vez más el comercio mundial de calzado, y países como Vietnam e Indonesia siguen aumentando su porcentaje en la producción mundial», explica la Comisión.
Las importaciones de calzado de países foráneos a la UE aumentaron casi un 6 % durante el periodo 2006-2009, mientras que las exportaciones de la UE disminuyeron un 16,4% durante el mismo periodo. Como consecuencia directa de la caída de las exportaciones, el número de fabricantes de calzado de los 27 Estados miembros de la UE se redujo en un 11,5% en 2008 con respecto a 2005 y durante el periodo 2005-2008 se perdieron 78.800 empleos directos en el sector, es decir, un 20% del total.
Las importaciones de calzado han aumentado también en España y durante el periodo 2006-2010 crecieron casi un 20%. Sin embargo, el impacto del desequilibrio entre importaciones y exportaciones fue mayor en el sector español del calzado que en el conjunto de la UE: el número de fabricantes disminuyó un 35,9% durante 2006-2010 (o un 24,27% en el periodo 2006-2009), ya que el número de empresas cayó de 2.283 a 1.462. El empleo se redujo en un 31,8% y en el mismo periodo se perdieron 10.663 empleos directos, según los datos de Bruselas.
La situación del empleo en la Comunidad Valencia, resalta la Comisión, «es especialmente frágil dado el impacto de la crisis económica actual en otros sectores, tales como la construcción, los muebles, los productos textiles, la cerámica y los juguetes, que en otras circunstancias hubieran ofrecido empleos alternativos a los antiguos trabajadores de la producción de calzado».
Por tanto, el apoyo del Fondo de Adaptación a la Globalización «resulta tanto más esencial porque puede ayudar a esos trabajadores a explorar oportunidades nuevas y diferentes».
Desde el comienzo del funcionamiento del Fondo en 2006, se han presentado 97 solicitudes. El Fondo ha pagado un total de 451 millones y ayudado a casi 89.000 trabajadores.
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