RRHH Digital. La nueva Iberia Express, filial para el corto y medio radio de Iberia, iniciará su andadura este domingo desde Madrid. Arrancará inicialmente con vuelos a Mallorca, Alicante, Málaga y Sevilla con precios de lanzamiento a partir de 25 euros.
A ellos se sumarán en mayo cinco nuevos destinos nacionales, Vigo Lanzarote, Granada, Menorca e Ibiza. Y en los meses de junio y julio operará ya a destinos europeos como Dublín, Riga, Mikonos y Nápoles, además de otros domésticos como Santiago, Fuerteventura y La Palma. En septiembre, se incorporará Ámsterdam, según ha explicado hoy el consejero delegado de la aerolínea, Luis Gallego.
La compañía también lanzará una campaña, que durará cinco días, con ofertas a partir de 45 euros para los vuelos a las islas Canarias y de 59 euros para los europeos. Eso sí, los billetes no se podrán comprar en la página web de Iberia Express hasta la próxima semana y de momento solo se distribuyen a través de los canales de venta de Iberia.
La nueva low cost, que realizará su primer vuelo este domingo desde Barajas con destino a Alicante, contará inicialmente con 500 empleados y cuatro aviones A320. Alcanzarán los 14 este año (aeronaves procedentes de la flota de Iberia) y aumentarán progresivamente hasta 16 aviones en 2013, 28 unidades en 2014 y 40 aviones en 2015.
El futuro de Iberia
La creación de esta nueva compañía, que ha sido contestada desde diversos colectivos de la empresa, en especial por parte de los pilotos a través de su sindicato (Sepla-Iberia), hasta el punto de generar doce días de huelga, es considerada como una parte fundamental para el futuro de Iberia.
«Desde el primer momento tuvimos claro que para competir en el complejo panorama europeo teníamos que tener unos costes en la media europea en un entorno en el que la mayoría de las compañías están en números rojos y otras quebrando. Nuestra filosofía es controlar los costes de forma eficiente, sostenible y garantizando la calidad del servicio y la seguridad», ha apuntado Gallego durante la puesta de largo oficial de la aerolínea.
Tres años después de que se pusiese sobre la mesa el proyecto de una aerolínea de bajo coste, el proyecto conseguirá salir a la luz, no sin esquivar grandes problemas. La estructura de bajo coste permitirá a la compañía reducir su volumen de costes y elevar su competitividad en el segmento de los desplazamientos de corto y medio radio. Según los cálculos de la propia empresa, el proyecto permitirá el ahorro de 100 millones de euros a la compañía hasta 2015.
Desde el inicio del año, IAG acumula una rentabilidad en bolsa superior al 19%, en un contexto económico difícil para las aerolíneas. La subida del precio del petróleo y la huelga de pilotos del sindicato Sepla no han conseguido desestabilizar la buena evolución en los parqués.
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