Recursos Humanos Digital. El profesor del IESE Business School Sandalio Gómez ha afirmado este lunes que empresarios y sindicatos tienen que trabajar «de forma comprometida» para evitar «las cinco trampas» de la negociación colectiva.
En concreto, estas «trampas» que deben evitar los agentes sociales son, según Gómez, el falso dilema entre la centralización y la descentralización; mantener la ultraactividad de los convenios; falta de una ley actual de huelga; falta de imaginación por parte del empresariado y de inflexibilidad por parte de los sindicatos; y falta de movilidad y flexibilidad salarial en base a productividad o resultados de la empresa.
«En los últimos meses se habla de forma insistente en la reforma de la negociación colectiva como una de las armas fundamentales para modificar la relación laboral en las empresas. ¿Centralización? ¿Descentralización? Parece importante reflexionar sobre estas alternativas y sobre los errores que se han cometido hasta ahora para ser capaces de elaborar un propuesta razonada», ha subrayado Gómez durante los ‘Desayunos informativos’ del IESE sobre la reforma del mercado laboral.
El profesor del IESE ha apostado por una propuesta «razonada», fruto del consenso que entre empresarios y sindicatos, que convierta la negociación de los convenios colectivos estatutarios y de los pactos de empresa en un «arma estratégica fundamental» para ayudar a la empresa a alcanzar la productividad y la flexibilidad necesarias para competir en un mundo cada vez más internacional.
Según ha informado esta escuela de negocios, Gómez recordó durante su intervención que la negociación colectiva está regulada en España en la Constitución y en el Estatuto de los Trabajadores, cuya última reforma en materia de negociación colectiva tuvo lugar el pasado mes de junio.
El profesor Sandalio Gómez destacó que las variables que influyen en la negociación colectiva son el marco jurídico laboral; la estrategia sindical; la estrategia empresarial; el nivel económico y social del país; la situación económica; la realidad económica, humana y laboral de la empresa, y la capacidad de negociación de los interlocutores sociales.
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