RRHH Digital. La Secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, ha asegurado que el plan de choque que impulsa el empleo a tiempo parcial, aprobado el pasado mes de febrero, ha permitido que se firmaron más de dos millones de este tipo de contrato en cinco meses.
Así lo ha señalado Rodríguez en declaraciones previas a la celebración en Toledo de una mesa redonda centrada en ‘Salarios, productividad y negociación colectiva’.
La secretaria de Estado de Empleo ha defendido las reformas laborales aprobadas por el Gobierno el mes de agosto mediante las que se ha prorrogado seis meses la ayuda económica para desempleados. En sus seis meses de vigencia esta medida ha ayudado a salir adelante, según Rodríguez a más de 100.000 personas, para lo que el Estado ha invertido más de 240 millones de euros.
Según Rodríguez, el Decreto Ley aprobado en agosto también ha reforzado la causalidad del despido, por lo que se ha prorrogado la posibilidad de que el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA) resarza con 8 días de indemnización por despido en el caso de que sean despidos procedentes.
Por su parte, el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrerr, que también ha asistido a esta mesa redonda, ha opinado que estas medidas de la negociación colectiva «debilitan» los derechos de los trabajadores, y ha asegurado que el Decreto Ley aprobado en agosto da un «salto regresivo» estableciendo la contratación temporal como «forma común de contratación» que potencia un «contrato precario» para los jóvenes.
En este sentido, el secretario de Acción Sindical ha señalado que el Gobierno central, con la medida del contrato de aprendizaje, plantea una medida de contratación con carácter precario que no desarrolla los contenidos formativos, y ha denunciado el contrato precario que alarga a 30 años la temporalidad del empleo, pudiendo llegar, según Ferrer, a los 33 años con este contrato.
Frente a ello, Toni Ferrer propondrá, junto a CC.OO., una «formación dual» que combine la formación en centros escolares con prácticas laborales con derechos laborales en las empresas.
«La recuperación no pasa por el recorte presupuestario o el recorte de políticas sociales o salarios a empleados públicos» ha asegurado Ferrer, sino que se debe realizar con «políticas de estímulo y de control del gasto», ha concluido.
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