RRHH Digital. El 81,3% de los 3.100.736 trabajadores afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social cotizan al Sistema por las bases mínimas, un total de 2.522.407, lo que explica la diferencia de prestaciones sociales de este colectivo respecto a los trabajadores del Régimen General.
El plazo para modificar las bases de cotización concluye el próximo día 30 de junio, ha informado el Ministerio de Trabajo en un comunicado.
El Sistema de Seguridad Social abonó el pasado 1 de mayo 8.782.955 pensiones, de las que 5.236.543 correspondían al Régimen General y 1.857.608 al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos. La pensión media nacional es de 803,83 euros; en el Régimen General es de 954,11 y en el RETA de 564,05 euros.
La Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) y diversas entidades vinculadas a la gestión del ámbito laboral – ATA, UPTA y el Consejo General de Graduados sociales – han venido divulgando entre los trabajadores autónomos los beneficios que conlleva cotizar por bases superiores a las mínimas así como las novedades legislativas introducidas durante el último año.
Una de las modificaciones fue introducida en la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2011, y tiene que ver con la elección de las bases de cotización. Los trabajadores que a 1 de enero de 2011 tenían 48 ó 49 años y venían cotizando por una base inferior a 1665,90 euros, no podrán optar por una cuantía superior a 1682,70 euros, salvo que lo soliciten antes del 30 de junio. En ese caso, la nueva base tendrá efectos a partir del 1 de julio de 2011.
En la misma dirección de mejora de las prestaciones sociales para los trabajadores autónomos, en la Ley 32/2010, de 5 de agosto, se estableció un sistema específico de protección por cese de actividad, que era una de las reivindicaciones históricas del colectivo. A 30 de abril, 637.546 autónomos, el 20,5% del total, cotizaban ya por contingencias profesionales, lo que les da acceso a esta nueva prestación.
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