RRHH Digital. El secretario de Acción Sindical de CC.OO., Ramón Górriz, ha defendido el convenio del sector frente al de empresa como «mejor» fórmula para articular y ordenar la negociación colectiva, al considerar que los convenios de empresa «debilitan» a ésta.
«La apuesta de los empresarios por el convenio de empresa lleva a la individualización de las relaciones laborales y al debilitamiento de la negociación colectiva», explicó Górriz en rueda de prensa en Pamplona con motivo del inicio de la VI Escuela Sindical ‘Javier Irigoyen’ de CCOO de Navarra.
El Ministerio de Trabajo ha remitido a los agentes sociales un borrador de la reforma que prepara en el que precisamente se da más capacidad de decisión a los convenios de empresa, pero manteniendo la prioridad de los sectoriales.
El sindicalista de CC.OO. afirmó además que las reformas unilaterales, una vez que el Gobierno apruebe los cambios en los convenios este viernes tras el fracaso de los negociaciones entre sindicatos y empresarios, «no sirven» a las relaciones laborales y que éstas tienen «éxito» cuando parten del acuerdo entre las partes.
Górriz aprovechó su intervención para reprochar a la patronal que el acuerdo no fructificó por la actitud de los sectores «más refractarios», por lo que censuró que la CEOE «sorprendiera» en la recta final de las conversaciones bilaterales con un nuevo papel donde volvía a las posiciones más maximalistas. «No es la primera vez que las organizaciones empresariales se desdicen de acuerdos que habían firmado», afirmó en alusión a la reforma laboral.
En este sentido, Górriz calificó de «irresponsabilidad supina» la actitud de las organizaciones empresariales respecto a la negociación colectiva al «poner sus intereses por encima de los intereses del país», que, a su juicio, «no cabe duda que están contaminados por los resultados electorales del 22-M».
«Hablamos de contaminación y no de orientación, creemos que ninguna fuerza política seria intente romper la autonomía de las partes en una negociación», aclaró, para después lamentar que determinados sectores especulen con aprovechar un eventual rescate de España para hacer una «contrarreforma».
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