Recursos Humanos Digital. El 59,9 por ciento de los padres considera que el futuro de sus hijos es peor, en comparación con su propia situación, según se desprende del estudio ‘Bienestar en España. Ideas de futuro desde el discurso de padres y madres’, realizado por la Federación de Ayuda a la Drogadicción (FAD) y Obra Social Caja Madrid.
La investigación, que ha sido presentada este jueves en la sede de Obra Social Caja Madrid, ha tomado en cuenta dos estudios cualitativos sobre grupos de discusión de todas las edades y varias encuestas realizadas por la FAD y el barómetro CIS del año 2010.
En base a estos datos, los investigadores han analizado la actual situación de crisis económica y las perspectivas de futuro, haciendo especial hincapié en la figura de los jóvenes como agentes «fundamentales» para afrontar la crisis.
«Los jóvenes son los únicos que pueden sacarnos de la crisis», asegura el director general de la FAD, Ignacio Calderón. Sin embargo, el 59,5 por ciento de los encuestados cree que la crisis influirá de forma negativa en su futuro económico y el 52,8 por ciento considera que el nivel de protección social del estado del bienestar se verá perjudicado.
Como explica el director técnico de la FAD, Eusebio Megías, esto se traduce en un discurso social «desesperanzador, pesimista y cargado de impotencia», que sitúa a España como un país con «mayores dificultades» para salir de la crisis, en comparación con el resto de países europeos.
De hecho, casi el 80 por ciento de los españoles cree que la situación económica de España es mala o muy mala. En concreto, y según los datos del barómetro CIS, el 41,3 por ciento de los encuestados cree que la situación de España es mala y el 37,9 piensa que es muy mala.
Además, aunque la sociedad es consciente de que el futuro está en manos de los jóvenes, acuden a ellos «con poca esperanza» porque les ve «anestesiados y sin capacidad para tomar las riendas». En este sentido, Megías, considera que se ve un cambio por parte de la población adulta, que deja atrás la protección social que se les tenía para empujarles a la acción.
«España está pidiendo a los jóvenes que se espabilen, que luchen, que se busquen la vida porque la única expectativa es que la salida de la crisis la protagonicen ellos», sentencia el director técnico de la FAD.
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