Recursos Humanos Digital. El director general del Servicio de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, ha asegurado que la reforma de las pensiones es un «paso serio» para garantizar la sostenibilidad del sistema de la Seguridad Social y ganarse la confianza de los mercados.
Durante su intervención en la jornada ‘La reforma de las pensiones: oportunidad, contenido y contexto’, organizada por la Escuela de Finanzas Aplicada (AFI), Malo de Molina, señaló que «la economía está en una situación de difícil salida» por sus desequilibrios y la hostilidad de los mercados, a lo que añadió que «la única forma es dar un paso adelante muy decidido y muy ambicioso en el terreno de las reformas».
Para Malo de Molina, la reforma de las pensiones es «de calado» y tiene una valor «simbólico» como compromiso del Gobierno para adentrarse en este importante proceso de reformas. Más aún, en tanto que las dudas sobre España vienen de su capacidad para reducir el déficit, reactivar la economía y generar empleo, la reforma de las pensiones es, a su juicio, «el mejor ejemplo de reforma que complementa todos estos frentes».
«Incidirá en el coste de la financiación externa», defendió por ello, antes de añadir que, en consecuencia, aliviará la situación de las entidades financieras y ayudará al crecimiento y a recuperar la confianza de los mercados. «La reforma de las pensiones despeja la incertidumbre y en estos momentos mejorarla es un ingrediente indispensable para la reactivación», apostilló.
Como minutos antes dijera el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, el director general del Servicio de Estudios del Banco de España apuntó que, aunque el sistema de pensiones sea sostenible y logre garantizar un nivel de prestaciones «razonable», no asegurará un nivel comparable al que muchos trabajadores han mantenido a lo largo de la vida laboral, por lo que «debe ser complementado con un sistema de ahorro privado».
Además, consideró necesario introducir durante el trámite parlamentario una fórmula de sostenibilidad que vincule las prestaciones a la expectativas de vida, para asegurar en todo momento y de forma «consistente» la viabilidad del sistema, y al mismo tiempo «evitar negociaciones sociales y políticas complicadas».
Al margen de la reforma de las pensiones, Malo de Molina indicó que en la senda reformista el siguiente paso debe ser la reforma de la negociación colectiva, que tiene como fecha límite el 19 de marzo, y «profundizar» en los cambios en el mercado de trabajo.
MEJORA LA ECONOMIA Y SE CUMPLE CON BRUSELAS
Prueba de la necesidad de reformas es, a su juicio, que los frutos de lo andado hasta ahora «ya se están viendo» en forma de una «mejoría tímida de la economía española en enero y febrero», tras una caída del 0,1% en 2010, dos décimas mejor que el 0,3% que vaticinaba el Gobierno. Con todo, Malo de Molina auguró una recuperación económica «gradual y lenta».
Del mismo modo, señaló que «es razonable pensar» que el objetivo de déficit del 6% en 2011 «se va a cumplir», a lo que añadió que, en el caso de que se produzca alguna desviación, el Gobierno «tiene potentes herramientas» para enderezar las cuentas públicas.
En este punto, Malo de Molina consideró que habrá que esperar para ver si se pueden cumplir el resto de los escalones hasta llegar a un déficit del 3% en 2013, ya que ello depende también del cumplimiento presupuestario de las comunidades autónomas. Al respecto, valoró como «sólido» el compromiso mostrado hasta la fecha por estas administraciones.
Los comentarios están cerrados.