Recursos Humanos Digital. Las políticas de responsabilidad social de las empresas (RSC) deben ser un marco idóneo» para que las organizaciones asuman la discapacidad en sus relaciones con los consumidores y usuarios según afirma el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez.
En el prólogo del libro La responsabilidad social empresarial en el ámbito de la discapacidad editado por el Cermi, el ministro asegura que la gestión de la diversidad a la vez que busca optimizar el proceso empresarial y mejorar la competitividad, contribuye a la cohesión social.
Para el responable del área de trabajo del Gobieno «la no discriminación y la igualdad de trato y de oportunidades de las personas con discapacidad se puede convertir en una ventaja competitiva», un valor añadido y una oportunidad de negocio para las organizaciones.
Según Gómez uno de los beneficios de la gestión de la diversidad es el incremento de captación del talento pues la empresa trabaja con una base de selección más amplia y además «la capacidad de una persona es independiente de su origen o grupo al que pertenece».
La diversidad es una estrategia orientada a la creación de un entorno que incluya todos los perfiles diversos de las personas con el fin de optimizar la eficacia del proceso empresarial.
En concreto, sobre la discapacidad, el ministro afirma que la responsabilidad social debe incorporar un compromiso para superar la desigualdad en los diferentes ámbitos de la actividad empresarial, incluyendo las actuaciones en la cadena de suministro y la contratación de personal.
Gómez concluye que las políticas de diversidad deben prestar una atención especial a las personas más desfavorecidas, que los las que experimentan una mayor exclusión sociolaboral.
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