Recursos Humanos Digital. El sindicato CSIF y el comité de huelga del hospital de Laredo han lamentado hoy la decisión, que consideran «irresponsable y unilateral», tomada por el comité negociador del Servicio Cántabro de Salud (SCS) de cancelar la reunión prevista para ayer, viernes, por lo que el próximo lunes, 8 de noviembre, se desarrollará una nueva jornada de huelga.
Tras asegurar que esta actitud del SCS «lo único que hace es contribuir al mantenimiento innecesario del conflicto», el sindicato se mostró nuevamente dispuesto a llegar a una solución del conflicto «lo antes posible» ya que es «consciente de los perjuicios que el mantenimiento del actual conflicto supone para los pacientes del hospital».
La presidenta del sector de Sanidad de CSIF, Margarita Ferreras, aseguró que la huelga se convocó ante lo que los médicos del centro consideran una «actitud intolerante» del gerente del hospital, Antonio Merino, que «se ha negado» a ofrecer una respuesta a los facultativos y negociar «cualquier tipo de alternativa».
Los médicos –dijo– demandaban una respuesta en relación con la alternativa que presentaron a los cambios introducidos «unilateralmente» por la dirección y que «no han sido negociados» ni con el colectivo médico, ni con las organizaciones sindicales y que, en su opinión, «distorsionan gravemente la organización de los servicios prestados a los usuarios».
Según Ferreras, la Gerencia del centro decidió, sin contar con la representación del personal, introducir modificaciones en la jornada y horario de trabajo, tanto de consultas como de quirófano, «lo que afecta no sólo al personal, sino también al resto de empleados del centro y a los pacientes».
Para CSIF, esta medida es «absolutamente ilegal» ante la falta de negociación con los trabajadores y el «incumplimiento» de los acuerdos anteriormente pactados.
Los comentarios están cerrados.