RRHH Digital. Facua ha dado su apoyo a la huelga general que han convocado los sindicatos mayoritarios el próximo 29 de septiembre con la promoción de un ‘Día sin Compras’ bajo el lema ‘Contra una Europa dominada por el mercado’.
En un comunicado, la organización ha explicado que convoca esta huelga de consumidores ante la puesta en marcha de medidas por parte del Ejecutivo para que la crisis la paguen «las víctimas y no los culpables».
Según Facua, los consumidores deben «decir no al cuestionamiento permanente» del Estado del bienestar y a los recortes que viene sufriendo, motivo por el que han planteado la huelga de consumidores el próximo 29 de septiembre.
«Padecemos una crisis causada por la desregulación de los mercados y la avaricia del sector financiero más especulativo, que en nuestro país ha sido agravada por el fin de la burbuja inmobiliaria», señala.
La organización ha elaborado un manifiesto que ha remitido a decenas de organizaciones a las que pide que se sumen a la convocatoria del ‘Día sin Compras’ en apoyo a la huelga general.
En dicho manifiesto, denuncia que en lugar de buscar soluciones cuestionando «un modelo basado en la especulación» se quiera utilizar la crisis «para justificar recortes sociales, recortes a los derechos de los trabajadores y recortes en las garantías y derechos de los consumidores».
De hecho, asegura que, durante los años de crecimiento, el modelo económico se ha basado en el consumismo de bienes y servicios y en la construcción de viviendas como sistema de inversión especulativo, cuyo fin era conseguir en poco tiempo grandes beneficios.
Este modelo, según Facua, ha generando profundos desequilibrios sociales solapados bajo un bienestar que se sustentaba en el endeudamiento familiar, la creación «artificial y artificiosa» de mercados poco transparentes y un abuso en la posición de las empresas frente a los ciudadanos.
Finalmente, el manifiesto recuerda que «son muchos los ejemplos y muchas las consecuencias sufridas estos años» y cita, entre ellos, la escalada «demencial» del precio de la vivienda, el endeudamiento familiar, las quiebras de grandes compañías o las irregularidades continuas de las compañías aéreas, entre otras cosas.
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