RRHH Digital. Según un estudio realizado por Aon Consulting, la firma líder en consultoría de beneficios sociales para empleados, cerca de un 60% de los trabajadores españoles piensa que debido a la situación económica actual tendrá que retrasar su jubilación más allá de la edad oficial. En este sentido, un 55% de éstos afirma que tendrán que hacerlo por más de dos años.
Los trabajadores europeos son igual de pesimistas al respecto. La media en Europa sitúa en un 55% al número de profesionales que piensa retrasar su jubilación debido a la situación económica de los últimos años. Un 40% de los trabajadores españoles piensa que este retraso en sus jubilaciones será por un período entre 2 y 5 años, mientras que un 15% cree que este período será superior a los 5 años.
Esta conclusión forma parte de la investigación “European Employee Benefits Benchmark“, que Aon Consulting ha realizado entre más de 7.500 trabajadores en Alemania, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Irlanda, Holanda, Noruega, Reino Unido y Suiza, diez de las economías líderes en Europa. El estudio se centra en las opiniones que trabajadores europeos tienen sobre asuntos como jubilación, beneficios sociales para empleados y otros temas relacionados con pensiones.
Desde hace varios años España ha ido tomando conciencia de la crisis de las pensiones en el país, llegando a anunciar a principios de año reformas en el sistema de pensiones que pretenden extender la edad de jubilación de los 65 a los 67 años. Estas reformas se han vuelto cada vez más necesarias debido al incremento de las expectativas de vida y a la estructura de la pirámide demográfica de población haciendo que el sistema de pensiones español se vea seriamente amenazado por un posible colapso. Esto se ha visto agravado recientemente por la tasa de paro, que actualmente es la más elevada de la eurozona con niveles cercanos al 20%.
Las mujeres trabajadoras españolas son algo más propensas que sus homólogos masculinos a retrasar su jubilación. Un 61% de las mujeres afirma que tendrá que trabajar más tiempo de lo planeado frente a un 57% de los hombres. La diferencia se acentúa por el impacto de la actual crisis económica. Escenarios como éste se repiten en toda Europa con excepción de Irlanda.
Jorge García-Perrote, Director de Aon Consulting en España, afirma: “Los recientes acontecimientos han constatado a nivel europeo que el valor de los fondos de pensiones puede caer drásticamente en un escenario de recesión económica, lo que ha sorprendido a mucha gente. Dado que la responsabilidad sobre los ahorros para la jubilación se está trasladando del Estado a empresas e individuos, la gente debe ser cada vez más consciente de la importancia de estos temas y de asegurarse de disponer de una buena planificación financiera sobre todo a medida que nos acercamos a la edad de jubilación.”
“Tradicionalmente para las personas de 40 años o menos, las pensiones no han sido un tema de preocupación, a pesar de ser el momento óptimo para empezar a establecer un plan de ahorro. Cuando vemos cómo el Gobierno plantea medidas como la mencionada de retraso de la edad de jubilación como vía para poder mantener una cierta correlación entre los años de cotización y los años de percepción de prestaciones, es lógico recomendar tanto a particulares como a empresas la aplicación de medidas en una dirección similar, tanto anticipando el inicio de las aportaciones a los planes privados para la jubilación como fomentando una vida profesional de mayor duración. Resulta de esta forma imprescindible acometer individualmente y lo antes posible una planificación financiera de nuestra jubilación, asesorándose cuando sea necesario, sobre qué alternativas ofrecen hoy en día los mercados financieros y aseguradores para estos fines. Por todo ello, veremos cómo poco a poco los modelos de pensiones en formato renta vitalicia irán tomando cada vez un mayor peso.”
“Con todo esto, creemos imprescindible que todo el mundo valore individualmente el impacto en su situación personal derivada de los cambios que se avecinan por la reforma laboral en curso y de la más que posible reforma del sistema de pensiones, cuyos primeros impactos ya se han visto con la congelación de las mismas.”
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