Recursos Humanos Digital. Trabajadores del grupo Marsans, a través del sindicato ELA, presentarán a lo largo de esta semana demandas en las que solicitan que se extinga su relación laboral «por incumplimientos graves de las obligaciones de la empresa y se les indemnice con 45 días por año trabajado.
Según informó el sindicato nacionalista en una nota de prensa, los empleados de Marsans aducen que «no tienen actividad en su puesto de trabajo, ya que no pueden realizar ninguna operación de venta y cuestionan la salubridad de las oficinas, ya que no se pagan ni alquileres ni servicios de limpieza».
Asimismo, han planteado una denuncia a inspección de Trabajo ante la obligación de los empleados a permanecer en los puestos de trabajo, sin posibilidad de desarrollar el trabajo habitual por falta de medios, clientes y proveedores.
De esta manera, los trabajadores acusan a la dirección de Marsans de «una mala gestión por parte de la empresa, de provocar esta inactividad al traspasar 240 millones de la sociedad a otras compañías del grupo como Air Comet».
Según denunciaron desde ELA, esta situación está causando bajas definitivas, donde el 40% de trabajadores «se han marchado a agencias de la competencia, y bajas médicas debido a la situación insostenible a nivel psicológico y físico para todos los trabajadores».
Estas denuncias se suman a las demandas realizadas por 15 trabajadores de Viajes Marsans de la provincia de Barcelona por incumplimiento contractual «muy grave», según el Colectivo Ronda, que lleva el caso, en las que se denuncia que la compañía, en un ejercicio de irresponsabilidad, ha traspasado fondos por valor de 240 millones de euros a otras empresas.
Los trabajadores se encuentran en esta situación desde principios de abril, cuando la Asociación Internacional de las Aerolíneas (IATA) retiró al grupo turístico los permisos para emitir billetes de avión. Después hicieron lo mismo el resto de proveedores de viajes y estancias, con lo que no pueden vender productos.
En los dos últimos meses, los trabajadores de Viajes Marsans han cobrado sus nóminas con unos quince días de retraso. Precisamente esta semana, recibieron la nómina de mayo, operación que ha supuesto un desembolso de más de tres millones de euros, cantidad inferior a la de otros meses debido a la marcha de entre 800 y 900 trabajadores.
Los empleados han propuesto a la compañía cerrar oficialmente las oficinas de Viajes Marsans durante los sábados, dado que prácticamente no registran actividad alguna.
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