Recursos Humanos Digital. El secretario de Estado de la Seguridad Social y secretario de Economía y Empleo del PSOE, Octavio Granado, afirmó hoy que con la congelación de las pensiones en 2011, medida incluida en el decreto antidéficit del Gobierno, se está pidiendo a cinco millones de los más de ocho millones de pensionistas españoles un «sacrificio» de entre 15 y 20 euros al mes durante un año, algo que consideró «razonable y proporcional» si se tiene en cuenta que en 2009 los pensionistas ganaron bastante poder adquisitivo.
«Estamos pidiendo a cada uno de esos cinco millones de pensionistas (los que cobran pensiones por encima de las mínimas) un sacrificio durante un año de unos 15 a 20 euros al mes. Es razonable repartir los sacrificios entre todos, porque la crisis nos ha hecho más pobres a todos», explicó el secretario de Estado, quien añadió que «en términos objetivos» los que menos habían notado la crisis hasta ahora eran los pensionistas y los trabajadores del sector público, frente al sector privado, más afectado.
Granado, en declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, reconoció que «la gente está muy enfadada» con esta medida, pero añadió que la mayor parte de los pensionistas, «que saben que sus pensiones han subido mucho en los últimos años», aceptan las razones por las que se ha tomado esta iniciativa, entre otras cosas porque muchos de ellos tienen hijos y nietos en el paro y son conscientes de que deben aportar su «granito de arena» a la recuperación.
El secretario de Estado advirtió de que sería «desafortunado» que el decreto se tramitara como proyecto de ley, porque las medidas tienen que estar en marcha cuanto antes. Aunque admitió que le gustaría tener un mayor grado de acuerdo y consenso político a la norma, Granado indicó que la política española «es lo que da de sí». «Hemos pasado del ¡Váyase, señor González! a ¡Zapatero, dimisión!», dijo.
Respecto al cambio de fecha para la prohibición a los ayuntamientos de endeudarse a largo plazo, Granado lo calificó de «anecdótico» y explicó que el problema con ese tema ha estado «a caballo entre la rectificación y la corrección de un error». «En un momento dado había dos textos y al final el que fue al BOE era el más inadecuado, ¿por error o por voluntad expresa de que fuera ese?. No lo sé», señaló.
En cuanto al impuesto a las rentas más altas que se presentará en las próximas semanas, Granado se mostró partidario de
repartir la carga fiscal, pero insistió en que para él lo fundamental es combatir el fraude. En relación a las Sociedades de Inversión Colectiva (Sicav) y a las sociedades de tenencia de valores, el secretario de Estado se inclinó por gravar los rendimientos de los socios y no a las sociedades en sí.
LA EDAD LEGAL DE JUBILACIÓN, UNA REFERENCIA
En otro orden de cosas, Granado destacó la buena marcha de la Seguridad Social, con 7.000 millones de euros de superávit hasta abril, y avanzó que su previsión es que 2010 se cierre con un saldo positivo cercano a los 4.000 millones de euros, por encima de los 3.000 millones de euros presupuestados inicialmente. «El sistema español de pensiones va a ser prácticamente el único de la OCDE que va a tener superávit», resaltó el secretario de Estado, que añadió que ello no oculta la necesidad de acometer reformas, entre ellas la de la edad legal de jubilación, que debe retrasarse «algo».
En este sentido, explicó que lo que quiere el Gobierno es que en el futuro la edad legal de jubilación sea una referencia para obtener el cien por cien de la pensión, sin que ello sea un obstáculo para que la gente que quiera y pueda se jubile un poco antes, eso sí sabiendo que no cobrará toda la pensión, sino una parte de ella. «La edad legal no va a ser la edad a la que se jubile todo el mundo, ni siquiera la mitad de los trabajadores, sino la referencia en la que se sitúe el cien por cien de la pensión», precisó.
En cuanto a la reforma laboral, Granado celebró el «gesto de responsabilidad» de la CEOE al renunciar a la rebaja de cotizaciones porque la Seguridad Social no puede permitirse un recorte de cuotas ni a corto plazo por la crisis ni a largo por el envejecimiento de la población. «La CEOE allana bastante el camino del acuerdo para la reforma laboral prescindiendo de una solicitud que era imposible de cumplir», reconoció.
Pese a las diferencias que mantienen sindicatos y patronal, Granado confió en que puedan llegar a un acuerdo sobre la reforma laboral. Ahora bien, precisó que si no hay acuerdo, «habrá un buen decreto del Gobierno», en el que se recogerán aquellos aspectos en los que sí ha habido aproximaciones entre los agentes sociales.
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