RRHH Digital. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, afirmó hoy que «mantiene su fiabilidad» en el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pero precisó que las decisiones que toma y «el cómo» las toma «ponen en jaque su credibilidad» ante la opinión pública.
«La manera de presentar ayer, sin decir ni el cómo ni el cuándo ni el cuánto, una subida de impuestos, que es un tema de gran envergadura para la sociedad española, no contribuye a reforzar la línea de confianza que debe transmitir el presidente, sino que lo que genera es confusión», advirtió.
Méndez, en declaraciones a la cadena SER recogidas por Europa Press, pidió a Zapatero que «reflexione seriamente» sobre cómo se producen este tipo de anuncios para evitar un «guirigay» como el de ayer con el tema de la subida de impuestos.
El dirigente de UGT subrayó que las medidas antidéficit del Gobierno suponen una «quiebra de su discurso político y un cambio de escenario», que cree que no será coyuntural. Así, avisó de que las centrales sindicales estarán «preparadas» ante cualquier eventualidad.
Méndez denunció que el paquete de medidas que aprobará hoy el Gobierno tiene una «escalofriante falta de equidad», pues actúa exclusivamente sobre el gasto y «gravita» sobre colectivos muy concretos como los pensionistas y empleados públicos. «No hay nada que se salve de este paquete», apuntó.
En relación al recurso que estudian interponer los sindicatos ante la Justicia contra el recorte salarial a los empleados públicos, Méndez apuntó que la idea «tiene un fundamento muy sólido», porque los salarios son derechos personales consolidados. «Esto puede abrirnos la vía a una sentencia favorable ante los tribunales», comentó.
EL GOBIERNO NO AYUDA AL ACUERDO SOCIAL CON SUS DECLARACIONES
Preguntado por la reforma laboral, el secretario general de UGT reiteró que están negociando con la patronal y que a finales de la próxima semana debería estar resuelto el acuerdo en su parte «sustancial». Ahora bien, Méndez advirtió de que las medidas y declaraciones del Gobierno no están ayudando a la negociación.
El dirigente sindical cree que hay que hacer cambios laborales para mejorar la contratación indefinida, defender a los jóvenes y evitar que «se queden en la cuneta» los 1,3 millones de parados de larga duración que hay actualmente.
En cuanto al coste del despido, Méndez se mostró dispuesto a «analizar y acordar» una especie de modelo austriaco, que haría que el Estado, en vez de dar tantas bonificaciones a las empresas, financiara parte del despido, conservando el trabajador todos sus derechos. También estuvo a favor de adaptar para España el modelo alemán de reducción de jornada para contrarrestar despidos y agilizar mucho este tema mediante la negociación colectiva.
Méndez indicó que habrá acuerdo si la reforma laboral va dirigida a reducir la dualidad del mercado laboral y a ayudar a jóvenes y parados de larga duración. «Ahora bien, si lo que se pretende es devaluar el factor trabajo para luchar contra la crisis y los movimientos especulativos nos encontrarán en frente», advirtió.
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