RRHH Digital. El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, descartó hoy la posibilidad de afrontar una rebaja de las cuotas sociales, como vienen reclamando los empresarios en el marco de la reforma laboral.
«Yo creo que a nadie se le escapa en estos momentos que ésta es una petición difícil de atender en un momento en el que cualquier rebaja de las cuotas a la Seguridad Social actuaría directamente en incremento del déficit», dijo el ministro durante una visita al Ayuntamiento de Lleida.
«Si todas las medidas que estamos adoptando persiguen la reducción del déficit difícilmente podemos hacerlas compatibles con otras que lo incrementen», aseveró.
Corbacho apuntó que en estos días se está expresando por parte de sindicatos y de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) una clara voluntad de trabajar para intentar llegar a un acuerdo en la mesa del diálogo social.
«Creo que es una opinión, ampliamente compartida por parte de todos que no puede mantenerse sine die esta situación de negociación permanente», afirmó el ministro antes de recordar que en el Congreso el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ya advirtió la semana pasada que la reforma tendrá que estar acordada antes de que acabe mayo.
«Estamos ya en la fase final del calendario. Esperemos en estos días que restan hasta final de mes haya un esfuerzo por parte de todos para intentar buscar un acuerdo y que esa reforma laboral sea el resultado del acuerdo del consenso entre patronal, sindicatos y Gobierno», afirmó.
El ministro mostró así su esperanza en que no sea una reforma laboral decidida unilateralmente por el Gobierno. Las posturas se han acercado mucho, según Corbacho que insistió en que hay materias en estos momentos que están haciendo un poco más difícil poder llegar a ese acuerdo, como la rebaja de cuotas que plantea la patronal y la estabilidad de los empleos a través del contrato de fomento que proponen los sindicatos.
«Actualmente hay mucha incertidumbre cuando se extingue un contrato de fomento. Creemos que hay que dar garantía jurídica para quien contrata con ese modelo, que si se extingue se contemple una indemnización de 33 días», dijo Corbacho.
El ministro reconoció que las medidas de ajuste anunciadas la semana pasada por Zapatero, que incluyen rebajas en los salarios de los funcionarios «lógicamente crea una cierta dificultad en el diálogo social».
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