RRHH Digital. Hoy y mañana se celebran en la histórica ciudad de Toledo las Jornadas Europeas sobre Economía Social, organizadas por la Presidencia Española de la UE. A este evento hemos sido convocados los sindicatos, que “vamos a asistir con el ánimo de escuchar y aprender”, según explica Jordi Ribó, responsable de la Secretaría de Economía Social y Autoempleo de la Confederación Sindical de CCOO.
“CCOO –señala Ribó- está reflexionando acerca del papel que en la economía española está llamada a jugar la economía social. Somos partidarios de abrir un espacio de diálogo, reflexión y concertación, a ser posible, con este sector empresarial, que aporta un valor importante a nuestro PIB, desde una posición de mutuo reconocimiento de ambos agentes.
Para CCOO, la economía social, entendiendo como tal empresas industriales y de servicios donde la propiedad reside en cooperativas o en sociedades laborales, o en núcleos de propiedad organizados en fórmulas ‘no convencionales’, “es un sector a tener en cuenta, y no sólo por su importancia sectorial, sino también por la forma participada de administrarse”.
“En una realidad legal, donde se nos recuerda día sí y día también que ‘la organización del trabajo es facultad exclusiva de la empresa’, formas de organizar la producción que se basan en la participación de los asociados o de los propios trabajadores-socios, merece la atención de los sindicatos, merece la atención del sindicalismo de clase confederal que CCOO quiere representar”, añade Ribó.
Hubo en nuestra historia experiencias importantísimas, sobre todo en los tiempos de la República. También en los años 80, cuando salíamos de la dictadura con un tejido productivo absolutamente periclitado, fueron las sociedades laborales y las cooperativas formas de búsqueda de alternativas, con distintas experiencias, positivas unas, otras fracasadas.
Ahora, la UE está llevando a cabo una directiva que habla de las distintas formas de empresa, y le da un espacio a la economía social. Esto es importante, pero no suficiente. Lo que necesitan estos sectores económicos, como otros sectores y familias, es que se abran las espitas del crédito, que los bancos no asfixien proyectos viables y, sobre todo, que se ayude a colectivos importantes de trabajadores a construir proyectos cooperativos con futuro.
España necesita este tejido empresarial y los sindicatos tenemos el reto de reconocernos mutuamente, economía social y movimiento sindical como agentes que podemos colaborar juntos para salir de esta crisis económica y para demostrar que se pueden hacer las cosas de forma diferente.
La futura Ley de Economía Social puede ser un instrumento si se tiene en cuenta a los agentes sociales, a los sindicatos, porque estamos interesados en ayudar a salir de la crisis con proyectos viables, tanto productivos como de servicios. La Confederación Sindical de CCOO colaborará para que los marcos de negociación y diálogo sean un instrumento útil también para la economía social.
Los comentarios están cerrados.