Recursos Humanos Digital. El seretario general de UGT, Cándido Méndez, apostó en Gijón por mantener los estímulos fiscales, la protección social para los trabajadores y darle prioridad a la estabilidad de las familias frente a las cifras macroeconómicas. Méndez puntualizó que la solución no es una reforma laboral, ya que según se haga puede ayudar o perjudicar, y señaló que la cifra del 20 por ciento de desempleo recogida por la EPA respalda al sindicato en este posicionamiento al tiempo que refleja que se sigue en una situación de recesión económica «muy fuerte».
Así lo dijo a los periodistas antes de participar en el X Seminario Europeo sobre el Empleo, titulado ‘Crisis y Lecciones’ y organizado por la Asociación de Periodistas Europeos en el Centro Cultural Antiguo Instituto. El líder sindical insistió en que ninguna reforma laboral va a ser la alternativa a mantener el gasto público y social y a recuperar cuanto antes el crédito para las familias y las pequeñas empresas españolas que son, a su juicio, «los problemas más graves y acuciantes que tiene la sociedad española», indicó.
En cuanto a la reforma laboral, señaló que en este momento la negociación sobre los cambios laborales tiene que estar precedida por una intensificación de las negociaciones bilaterales entre los sindicatos y la patronal. Para él, el mayor escollo son los posicionamientos de la patronal y añadió que si se avanza en esas negociaciones bilaterales con celeridad será más fácil y en un tiempo más breve un acuerdo a tres bandas.
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