RRHH Digital. El habito de comer o cenar frente a la televisión favorece la ingesta de una mayor cantidad de alimento y una reducción en su calidad, según un estudio de la Universidad de Illinois (EEUU) recogido por la revista «Consumer Eroski».
El estudio muestra que comer frente a la televisión suele llevar al descontrol en los alimentos ingeridos y a una elección de productos menos saludables.
Los expertos de la universidad estadounidense señalan que alimentarse de manera inconsciente mientras se presta poca atención a esta actividad, lleva a los adultos, niños y adolescentes a comer más y peor.
Por otro lado, «Consumer Eroski» llevó a cabo otro estudio que muestra la influencia de la publicidad en los hábitos alimenticios.
El informe, que analizó 6.300 anuncios emitidos sobre alimentos en 12 cadenas de televisión, concluyó que los «spots» dirigidos al público infantil fomentan el consumo de productos que propician la obesidad.
Los comentarios están cerrados.