Sindicatos exigen el reconocimiento del permiso de lactancia para las azafatas de vuelo

RRHH Digital. El Sector Aéreo y de Servicios Turísticos de la Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de CCOO ha reafirmado su compromiso de seguir trabajando para evitar que se vulnere el derecho de las Tripulantes de Cabina de Pasajeros (TCP) a recibir el permiso por riesgo para la lactancia.

Durante los últimos meses, diversas mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales de la Seguridad Social están desestimando el reconocimiento de prestación de riesgo durante la lactancia natural a madres con hijos en edad de lactancia (hasta los nueve meses) cuya profesión es la de TCP.

Para justificar su negativa a reconocer este derecho, las mutuas aluden a lo establecido en una guía editada por la Asociación Española de Pediatría con el título “Orientaciones para la valoración del riesgo laboral durante la lactancia materna”, en la que no se tiene en cuenta, según CCOO, que lo fundamental en el caso de estas mujeres es que el alejamiento físico de sus hijos durante varios días impide la alimentación directa y materna.

CCOO confía en que una próxima resolución del Instituto Nacional de Higiene en el Trabajo (INSHT), órgano científico y técnico de la Administración General del Estado especializado en estos asuntos, dé la razón al sindicato en sus postulados y rechace las argumentaciones de la Asociación Española de Pediatría.

Por otra parte, CCOO ha criticado también otra guía editada por la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, titulada “Orientaciones para la valoración del riesgo laboral y la incapacidad temporal durante el embarazo”, en la que se afirma que, en las empresas de handling,  el hecho de que una mujer embarazada maneje cargas de más de diez kilos no supone ningún riesgo hasta las 18 semanas de gestación.

También en este caso, el Sector Aéreo y Servicios Turísticos de CCOO envió una carta al presidente de esta sociedad para manifestar su discrepancia y dejar claro que, desde cualquier punto de vista, parece inadmisible que una mujer embarazada maneje cargas en las condiciones en las que se hace en los aeropuertos españoles.