RRHH Digital. El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, confía en que a finales de este año se cree «suavemente empleo«, y la destrucción de puestos de trabajo que se prevé registrar en la primera parte del año se compense en la segunda.
La previsión de Campa coincide con la del jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, quien en el debate sobre economía celebrado la semana pasada en el Congreso señaló que la creación neta de empleo volverá a finales de este año.
En una entrevista en la Cadena Ser, Campa advirtió de que la reforma de las pensiones es necesaria y adecuada, y la posibilidad de solucionar el problema -el riesgo de que el sistema no se sostenga en dos o tres décadas- es «mucho más fácil cuanto antes se acometa».
Por eso defendió la propuesta del Ejecutivo de alargar la vida laboral, y subrayó que el mantenimiento de los trabajadores en el mercado laboral es a medio plazo una «fuente de riqueza», lo que contrapuso al uso de las prejubilaciones en épocas de crisis.
El «número dos» de Economía entiende, «por supuesto», que los sindicatos vayan a manifestarse -mañana comienzan las movilizaciones– contra esta reforma, «dentro de la legitimidad y el funcionamiento normal del sistema democrático», y no cree que esta cuestión vaya a suponer el fin de la paz social.
Por otra parte, Campa insistió en que la reforma laboral que se acuerde con los agentes sociales tiene que acabar con la elevada «segmentación» del mercado laboral, con unos empleos temporales que soportan el ajuste en tiempos de crisis y un trabajo indefinido tan estable que impide, entre otras cosas, adaptar los salarios a la productividad.
Además se mostró convencido de que los sindicatos comparten este diagnóstico y a medio plazo estarán de acuerdo en que eliminar esta segmentación es el «objetivo más claro de cualquier reforma».
En la entrevista, Campa expresó su satisfacción por la colocación la semana pasada de 5.000 millones de euros en deuda mediante bonos a quince años. En su opinión, «no había duda de que se colocarían», pero la buena noticia es que hubo mucha demanda y se hizo al precio «adecuado».
Valoró así los efectos de los viajes que ha hecho en las últimas semanas para convencer a los inversores de la solvencia de la economía española.
En su opinión, «la confianza se genera dando información», y eso es lo que ha tratado de hacer, además de exponer un «diagnóstico» que, en su opinión, ha sido compartido por los inversores.
En su opinión no ha habido ni hay una imagen nefasta de la economía española y lo que necesitaban los inversores era conocer las «cosas específicas», las peculiaridades de la crisis en este país.
José Manuel Campa insistió en rechazar que haya habido una conspiración contra España en los mercados.
Lo que sí cree es que se ha producido un «nerviosismo psicológico» porque determinadas «percepciones generalizadas y algunos estereotipos se fueron extendiendo» en algunos países de la zona euro, y algunos inversores tomaron decisiones a corto plazo para intentar obtener un beneficio y tomar posiciones en los mercados.
Por otro lado, Campa confía en que el Gobierno alcance un pacto con los partidos políticos, y añadió que su responsabilidad como secretario de Estado es la de promover propuestas para el debate y buscar el máximo consenso.
Advirtió en cualquier caso de que hay medidas que no son adecuadas en este momento, como la bajada de impuestos, que a corto plazo puede hacer que aumente el déficit estructural porque «empeoraría la capacidad recaudatoria»,aunque tuviera «aparentemente» la ventaja de mejorar la capacidad de gasto de inversión de los agentes privados.
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