RRHH Digital. El grupo de desempleados de Maracena (Granada) que permanece encerrado desde el pasado miércoles en la parroquia del pueblo para exigir un empleo, han cumplido hoy cuatro días en huelga de hambre para exigir que desde el Ayuntamiento se les ofrezca una oportunidad laboral. Están «cansados» pero «fuertes» en su ánimo de «llegar hasta el final con todas las consecuencias», según señaló hoy a Europa Press el portavoz de la iniciativa, José Carlos Polo, de 39 años y padre de dos hijos.
«Esta es nuestra última opción, lo hemos perdido todo y vivimos esto con desesperación. Nuestra familias nos arropan, pero llevan muy mal vernos así», explicó Polo, que secunda la protesta junto con otros cuatro padres de familia de mediana edad que perdieron su empleo en el sector de la construcción hace más de un año y que a su vez representan a un conjunto de 14 parados que se encuentran en la misma situación, esto es, sin prestaciones de desempleo o «a punto de que se le acaben».
Además, ya han recopilado unas 1.600 firmas de apoyo de los vecinos de la localidad, que avalan la protesta surgida porque el Ayuntamiento de la localidad gestiona la bolsa de empleo con «favoritismos».
Polo explicó que la última vez que hablaron con el regidor, Noel López (PSOE), –unos días antes de iniciar la protesta– les aseguró que «miraría sus casos con lupa» para ayudarles, pero «no sólo no lo ha hecho sino que además nos ha puesto a todos una multa de 280 euros por desorden público cuando en realidad no hubo ningún escándalo».
RESPUESTA DEL AYUNTAMIENTO
Por su parte, el Ayuntamiento de la localidad informó en un comunicado que el alcalde ha solicitado esta semana, mediante un escrito dirigido a la Subdelegación del Gobierno, la suspensión de la sanción aplicada a los participantes y organizadores de la concentración que se produjo el 3 de diciembre en el edificio consistorial y para la que no se había solicitado permiso o autorización.
Según aclaró Antonio García Leiva, primer teniente de alcalde, el Ayuntamiento no es competente para imponer sanciones y «en ningún momento se ha instado desde el consistorio para que se formulara la denuncia». Fueron agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado quienes se personaron en el lugar de la concentración y comprobaron que se estaba realizando sin autorización.
Con respecto a la protesta, el edil de Recursos Humanos y Contratación aseguró que aunque el Ayuntamiento está haciendo rotar la bolsa de empleo «al máximo de sus posibilidades», contratando a 516 personas distintas en dos años y medio frente a las 146 de los cuatro años de legislatura anterior (PP), «no puede absorber a las 3.200 personas que están en dicha bolsa, pues sus recursos no son ilimitados». «Sería injusto ayudar antes a quienes más protestan o más ruido hacen saltándonos a otras personas de la lista de contratación que, aunque en silencio, también viven una situación desesperada. El Ayuntamiento trabaja para todos, para los que protestan y para los que no, y no estamos dispuestos a ceder ante ningún tipo de chantaje o amenaza y menos, cuando se puede intuir y entrever que viene alimentado o manipulado por motivaciones políticas», aseveró el teniente del alcalde.
García Leiva insistió además en que tanto los criterios de la bolsa como su baremación son «totalmente públicos y transparentes», fueron aprobados en pleno hace doce años y están a disposición de cualquier persona que quiera consultarlos. «La bolsa tiene ahora un 75% de rotación mientras que en la pasada legislatura (PP) solo alcanzó un 50%. El Partido Popular no se molestó en cambiar el sistema que tanto critica ahora», apostilló.
Además, según palabras del concejal de Recursos Humanos, algunos de los manifestantes no están inscritos en la bolsa, otros no son del municipio y algunos ya han trabajado en el Ayuntamiento. «Nuestro alcalde ha estado dispuesto a escucharles y les ha atendido tantas veces lo han solicitado e incluso ha tomado iniciativas para reunirse con ellos y en ningún momento a instado o formulado denuncia alguna contra ellos», concluyó Leiva.
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