RRHH Digital. Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) reconoció que los acuerdos de ampliación de jornada laboral firmados entre los controladores y el gestor aeroportuario durante los últimos cinco años desde que venció el convenio, son «nulos de pleno derecho».
De hecho, fuentes del gestor aeroportuario confirmaron que las retribuciones de horas extraordinarias pagadas a los controladores aéreos, como parte de estos acuerdos son «ilegales» desde el punto de vista presupuestario, ya que no cuentan con las autorizaciones correspondientes por parte de la Administración.
Las mismas fuentes matizaron que aunque se ha cometido una «ilegalidad presupuestaria», AENA no tuvo más remedio que llegar a acuerdos con el colectivo para evitar «un colapso del servicio».
A este respecto destacaron que durante estos años, y para evitar que se produjeran problemas en los aeropuertos, el gestor aeroportuario se ha visto obligado a aceptar «casi cualquier cosa» para asegurarse de que el servicio de control se prestara con normalidad.
«El Gobierno ha dicho basta», aseveraron las mismas fuentes en referencia al Real Decreto por el cual Fomento asume a partir de hoy la organización del trabajo de los controladores.
De hecho, las fuentes calculan que aplicando el Real Decreto, el déficit existente en navegación aérea se eliminaría por completo en el ejercicio 2012.
Según cifras proporcionadas por las mismas fuentes, en el año 2000 trabajaron 1.680 controladores aéreos cuya masa salarial ascendió a 156 millones de euros. Posteriormente, la masa salarial ha ido incrementándose de manera paulatina y a un ritmo mucho mayor de las contrataciones hasta los 749 millones de euros de 2009, cuando trabajaron 2.401 controladores aéreos.
Esto supone un aumento de entre un 14% y un 15% al año hasta alcanzar los costes actuales, que han causado la actual pérdida de competitividad del ente público
Según el nuevo marco, se pretende reducir el salario de los controladores de 350.000 euros de media anual hasta los 200.000 euros, señalaron las mismas fuentes, que añadieron que durante los últimos cinco años, cerca de la mitad del sueldo de los controladores estaba constituido por ingresos procedentes del cobro de estas horas extras «ilegales», con lo cual la presunta ilegalidad presupuestaria ascendería a miles de millones de euros, aunque el Ministerio no dispone de cifras precisas.
El convenio de 1999 establece 1.200 horas de trabajo, las horas trabajadas fuera de este marco fueron pagadas como horas extraordinarias a un precio de 2,65 veces la hora normal, y según el Real Decreto ley, la media de horas trabajadas por cada controlador asciende a 1.750 horas.
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