RRHH Digital. Los secretarios generales de CC.OO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, respectivamente, pidieron hoy al Gobierno que «reconsidere» y reoriente sus propuestas en materia de pensiones, al considerarlas lesivas para los trabajadores, y confiaron en no tener que llegar a convocar una huelga general, medida que ahora mismo no se plantean pero que no acaban de descartar si se produce una agresión.
Toxo, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, se mostró «molesto» con el ambiente que se ha generado, sobre todo por el tema de las pensiones, y denunció que se está ante un «desgobierno absoluto» de la situación. «A lo mejor alguien desde el propio Gobierno se está haciendo la cama», dejó caer el líder sindical, que negó que los sindicatos hayan estado apoyando al Ejecutivo hasta ahora.
A Toxo tampoco le ha gustado que el Gobierno no haya atendido a la petición sindical de retrasar la presentación, hoy, en Consejo de Ministros de sus propuestas para reformar el mercado laboral. Así, y aunque admitió que «está en su derecho», indicó que es la primera vez que el Ejecutivo aprueba un paquete de propuestas para llevar al diálogo social, un hecho novedoso que puede interferir en las negociaciones entre sindicatos y patronal para cerrar un acuerdo de negociación colectiva.
«Estamos intentando ultimar un acuerdo de negociación colectiva con empresarios, y esta vez sí creo que habrá acuerdo, confío en ello, pero los momentos finales de una negociación son los más delicados. Incidir desde fuera aunque sea de manera indirecta, cambiando el campo en el que se está trabajando, induciendo a las partes a mirar hacia otro lado no es lo más oportuno», subrayó Toxo, que invitó al Gobierno «a medir los tiempos».
El dirigente de CC.OO. aseguró que el Ejecutivo «ha dado un paso en una dirección tremendamente equivocada» en materia de pensiones y advirtió de que ello se le puede «volver muy en contra» y de que si se consolida ese cambio de actitud «las relaciones se irán deteriorando», en un momento, subrayó, en el que se necesita el diálogo y el acuerdo.
«Es posible que haya pesado más el ambiente internacional, las agencias de calificación, que la situación que se podía generar en el país», dijo. Al respecto, insistió en que el Gobierno ha cometido un «error de cálculo» si el efecto que perseguía era el de influir en las agencias de calificación, y la primera muestra, precisó, está en el comportamiento de las Bolsas ayer.
En este punto, reconoció que las palabras «un tanto irresponsables» del comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, «estableciendo comparaciones sin razón de ser» entre España y Grecia también han influído en la caída del mercado bursátil.
Respecto a si está dispuesto a convocar una huelga general, Toxo manifestó que no ha hablado todavía de una movilización de esta naturaleza, porque es un tema muy serio. De momento, los sindicatos saldrán a la calle a finales de este mes para defender el sistema de protección social, pero Toxo señaló que se estudiarán «ulteriores medidas en función de cómo evolucionen los acontecimientos».
MÉNDEZ: HUELGA GENERAL, «EL TIEMPO LO DIRÁ».
En línea similar se expresó el secretario general de UGT, Cándido Méndez, quien afirmó que UGT no contempla la convocatoria de una huelga general «salvo en un escenario de confrontación general». «El tiempo lo dirá y espero que el tiempo no nos aboque a esa situación», apuntó el dirigente sindical, que añadió que lo que España necesita ahora no es el conflicto, sino el diálogo y el acuerdo.
«En una situación como ésta, la paz social es un bien a preservar, y estamos en la obligación de preservarlo, todos, el Gobierno, los sindicatos y los empresarios», recordó Méndez, quien denunció que, con sus propuestas, el Ejeuctivo ha generado «alarma e incertidumbre», quizá de manera «involuntaria». «Ha puesto en tela de juicio el sistema de pensiones y ha planteado recortes (en el gasto público) que no hay por dónde cogerlos», criticó.
El dirigente de UGT señaló que las propuestas del Gobierno en pensiones son muy serias, pues no sólo plantea el retraso de la edad de jubilación hasta los 67 años, sino que además «pretende tocar también» el periodo de cálculo de la pensión y el número de años cotizados para tener derecho a ella.
«Yo creo que eso supone un cambio de orientación del Gobierno en materia de política social. Quiero que lo reconsidere en profundidad, y si no, espero que en el Pacto de Toledo no se alcance el consenso suficiente», declaró Méndez.
El dirigente de UGT aseguró que los sindicatos irán juntos a las manifestaciones de finales de mes, idea que, en cualquier caso, aún tiene que someter a la consideración del Comité Confederal del sindicato el próximo martes.
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