RRHH Digital. El portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, acusó hoy a los sindicatos de estar «más preocupados» por apoyar al Gobierno desde «ideologías trasnochadas» que por luchar para garantizar el empleo, y señaló que, a su juicio, «no están cumpliendo su tarea en estos momentos».
«Allá ellos», incidió el dirigente ‘popular’ durante un desayuno informativo organizado por el Executive Fórum y el diario Negocio, acusando a CC.OO. y UGT de mantener un «discurso de resignación» ante la destrucción de empleo, ante el que la valoración la tendrán que hacer los propios afiliados.
Montoro defendió el papel fundamental en la sociedad civil de la CEOE y acusó al Ejecutivo socialista de querer «meter mano» para elegir a sus dirigentes.
LOS PROBLEMAS «OBJETIVOS» DE DÍAZ FERRÁN
Así, denunció que el Gobierno se «aproveche» de determinados problemas que, aunque «objetivamente están ahí» -en alusión a las dificultades de las empresas del presidente de la patronal Gerardo Díaz Ferrán- no deben usarse con fines intervencionistas con el objeto de proponer candidatos «que dirijan a su gusto».
Ante el inicio de la nueva fase del diálogo social, el dirigente ‘popular’ señaló que todavía no se conocen las propuestas del Gobierno, pero reiteró que el titular de Trabajo, Celestino Corbacho, pasará a la historia como el ministro «que se negó a la necesaria reforma laboral», aunque ahora sostenga lo contrario.
«EL INEM ES UN MAL RECOLOCADOR»
La propuesta del PP en este sentido, es volver a las líneas de la reforma impulsada en 1997, con «nuevos contratos» que, entre otras novedades, supongan una reducción de las indemnizaciones por despido para reducir la temporalidad, sin que esto suponga una «pérdida de derechos sociales».
En este sentido, aseguró que el PP ha llevado esta propuesta al Congreso anteriormente en esta legislatura y volverá a hacerlo.
Asimismo, insistió en la necesidad de reformar la negociación colectiva para ligar la evolución de los salarios a la productividad de las empresas y no a los «fantasmagóricos» datos de inflación, un mecanismo que, en su opinión, «ya no tiene sentido en España».
Además, insistió en una reforma de los servicios de empleo que permita la colaboración con las empresas de trabajo temporal. «El Inem es un mal recolocador», aseveró.
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