«Cada vez más los parados se hacen voluntarios mientras se soluciona su situación laboral»

RRHH Digital. RRHH Digital se ha sentado con Ana García, Directora de Voluntariado de Cruz Roja Comunidad de Madrid para plantearla las siguientes cuestiones:

¿Cuál es el valor añadido de un candidato que participe en Voluntariado?

La acción voluntaria incrementa las competencias de cada persona, ya que una persona voluntaria:

1.-Está capacitada y se recicla continuamente.
2.-Realiza su labor dentro de organizaciones profesionales.
3.-Trabaja en equipo, comparte esfuerzos, objetivos, recursos, fracasos y éxitos.
4.-Es emprendedora y proactiva con la realidad que le rodea.
5.- Trabaja por proyectos, maneja la importancia del tiempo, el coste y la calidad.
6.-Se identifica e involucra con la organización en la que participa.
7.- Es especialista en identificar necesidades y riesgos.
8.- Trabaja en la diversidad, convive en la diferencia y respeta todos los puntos de vista.
9.- Encara las situaciones difíciles, controla la tensión para encontrar soluciones.
10.-Está concienciada y comprometida, se esfuerza en compartir sus conocimientos para mejorar su entorno.

¿Cómo nace la iniciativa Marca la diferencia?

Desde el Departamento de Voluntariado de Cruz Roja Comunidad de Madrid venimos detectando en los últimos meses un incremento del número de personas voluntarias con dificultades de acceso al mercado del trabajo asalariado. Están desempleados pero han decidido mientras su situación laboral se solventa llevar a cabo acciones de solidaridad con colectivos que se encuentran en situación de riesgo.

Socialmente nos encontramos en un momento en el que el aumento del paro, acompañado de la precarización de algunos empleos con bajos sueldos e inestabilidad temporal está conduciendo a muchas personas hacia un futuro incierto. Queremos contemplar aquí el trabajo no sólo como remuneración económica para el individuo, sino también como una forma de estar vinculado a la sociedad;  el carecer de empleo o tenerlo en precario merma las posibilidades de integración pudiéndose romper la cohesión social, al relegar a este colectivo hacia una situación de exclusión.
 
Ante esta situación y reflexión Cruz Roja plantea el proyecto MARCA LA DIFERENCIA, en el que se contempla una doble dimensión: por un lado entendemos que el ser una persona voluntaria habilita ciertas capacidades que son de más difícil adquisición,  como puede ser el establecimiento y mantenimiento de relaciones personales, de adaptación al cambio y experiencia en el trabajo en equipo, entre otros. Por otro lado el mercado laboral admite que estos valores y experiencias son positivamente reconocidos y suponen en ocasiones un diferenciador en la contratación de nuevo personal o valoración de curriculum.