RRHH Digital. El lehendakari, Patxi López, se opuso ayer a una reforma laboral que «abarate» o «restrinja» los derechos de los trabajadores. Además, se mostró convencido de que deberán pasar las «turbulencias» de la crisis para que un proceso de fusión entre las cajas vascas «culmine con éxito».
Durante su participación en el Foro Cinco Días, celebrado en Bilbao, admitió que la crisis económica «ha puesto sobre la mesa» la necesidad de llevar a cabo una reflexión sobre «el actual marco regulador de las relaciones laborales». Sin embargo, aclaró que el Gobierno vasco «no apuesta, de ninguna de las maneras, porque esto nos lleve a la conclusión de que lo que hace falta es abaratar el despido ni restringir los derechos de los trabajadores».
Por contra, aclaró que la intención de su Gabinete es la de «proteger y fomentar el empleo garantizando los derechos de los trabajadores». «Tenemos que hacer una reflexión serena, seria, profunda, que nos ayude a superar una crisis, que está teniendo unas consecuencias insólitas», dijo.
En este sentido, recordó que tanto en Euskadi como en el conjunto del Estado se destruye más empleo que en otros países que han registrado caídas más acusadas de sus economías. «Demos de explorar fórmulas que nos lleven al ejemplo alemán y antes de llegar a la generalización de los despidos, poner en marcha otras herramientas y otros instrumentos», precisó.
López considero que los ERE «son uno de ellos» pero se mostró partidario de buscar «fórmulas de reparto de los tiempos de trabajo», de forma que se palien los efectos de la crisis en el empleo. «Tenemos que hacer una reflexión de cómo logramos conjugar no renunciar a ninguno de los derechos de los trabajadores y, a la vez, logramos aumentar la competitividad de las empresas», expresó.
CAJAS
El lehendakari también se refirió a la postura que mantienen las cajas de ahorros vascas respecto a un proceso de integración y deseó que «si hay un próximo intento, que seguramente lo habrá, culmine con éxito».
A su juicio, las entidades financieras vascas son «las más solventes» de toda España y, hasta la fecha, han hecho «un planteamiento inteligente de este tiempo y de este año 2010 de dificultades».
Según el presidente del Ejecutivo, en la actualidad, las tres cajas deben centrarse en «sortear, de la mejor manera posible, esta situación delicada, y salir de esta coyuntura fortalecidas». «Cuando esto pase -puntualizó- será, seguramente, el momento de tranquilidad y serenidad para plantear una fusión que culmine con éxito», dijo.
La integración deberá tener en cuenta, según López, los «equilibrios territoriales, siempre delicados, además de la pluralidad de la sociedad, que son cajas y en la importancia la obra social». «Espero que llegará ese momento en que hayamos pasado todas las turbulencias para que un proceso de estas características se pueda plantear con garantías», señaló.
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