El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, admitió ayer que el Ejecutivo está preocupado por el devenir de las empresas del presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, pero mostró su respeto hacia su figura y eludió opinar sobre su futuro en la patronal.
Durante la rueda de prensa en La Moncloa para hacer un balance del año 2009, Zapatero dijo que el Gobierno debe ser «especialmente cauto» en este tema, por lo que eludió hacer alguna valoración personal sobre Díaz Ferrán.
«Las dificultades de sus empresas preocupan lógicamente al Gobierno, que trata de ayudar como con todas las empresas, pero no debo hacer ningún juicio de valor sobre su trayectoria o su futuro en relación con la institución. Es un tema de la CEOE que el Gobierno debe respetar, especialmente el presidente del Gobierno, y yo respeto», reiteró.
En los últimos días, han surgido algunas voces que han cuestionado la idoneidad de que Díaz Ferrán permanezca al frente de la CEOE, después de que Air Comet, empresa de su propiedad, haya anunciado su intención de presentar concurso de acreedores.
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