RRHH Digital. El secretario confederal de Acción Sindical de Comisiones Obreras, Ramón Górriz, aseguró ayer que la «insuficiente» subida del 1,5% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para 2010 supone «reducir la cohesión social y castigar a las capas más débiles de los trabajadores».
Asimismo, Górriz denunció que con esta subida se hace muy improbable el cumplimiento del compromiso del Gobierno con los sindicatos de alcanzar un mínimo de 800 euros en 2012, «además de romper la relación que debe existir entre el incremento del salario mínimo y las pensiones mínimas».
«La crisis económica no puede servir como excusa para hacer recaer en los más débiles el peso de las medidas de ajuste y desistir en el objetivo de alcanzar un salario mínimo de 800 euros en la actual legislatura, máxime teniendo en cuenta que la subida del SMI afecta a un número relativamente pequeño de trabajadores y, por tanto, el impacto sobre la economía es igualmente moderado», argumentó.
Igualmente, CC.OO. recalcó que la evolución de las pensiones mínimas debe tener relación con la del SMI, dentro de un concepto amplio de rentas mínimas garantizadas para el conjunto de la población, sin tratar a personas activas y pensionistas como departamentos estancos.
Según el sindicato, la subida en 2010 entre un 2% y un 5,5% de las pensiones mínimas, mientras que el incremento del SMI ha sido del 1,5% genera un elemento de distorsión en esta relación.
CC.OO recuerda que el salario mínimo español es uno de los más bajos de la Unión Europea (UE-15), y que la mejora del poder de compra del SMI que ha venido experimentando desde 2004 sin embargo, a pesar de estas diferencias, ha contribuido al fortalecimiento de la cohesión social mejorando las condiciones de las capas más débiles.
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