La Asociación Unificada de la Guardia Civil continúa a la espera de que la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior concluya su investigación y decida respecto a la denuncia que esta asociación profesional de la Benemérita presentó el pasado 13 de julio contra el teniente general Cándido Cardiel por utilizar para su interés personal, supuestamente, dos vehículos oficiales en Zaragoza.
La AUGC esperará a agotar el trámite administrativo, aunque sus servicios jurídicos están preparando una denuncia formal ante los tribunales de Justicia.
Supuestamente, el teniente general Cándido Cardiel utilizó dos coches oficiales en su beneficio personal con motivo de la boda de su hija, que tuvo lugar en Zaragoza el fin de semana del 13 y el 14 de junio.
La AUGC presentó un escrito aportando información sobre los hechos el pasado 13 de julio ante la Inspección de Personal y Servicios de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior, sin que haya obtenido respuesta oficial hasta el momento.
El escrito se presentó a través del Registro de la Delegación del Gobierno en Aragón. Fuentes de la Delegación informaron a Europa Press de que el escrito fue remitido a la Inspección de Personal y Servicios de la Secretaria de Estado de Seguridad.
Asimismo, fuentes de la Secretaría de Estado de Seguridad indicaron que el Ministerio del Interior está realizando las averiguaciones pertinentes. No existe un plazo legal para que Interior resuelva esta denuncia administrativa.
Según indicó la AUGC a Europa Press, el viernes 12 de junio, a las 13.30 horas, aparcaron en la zona de seguridad de la Comandancia del Instituto Armado en Zaragoza dos vehículos del Parque Móvil del Cuerpo en Madrid, conducidos por sendos agentes. Uno de los coches era un Audi A6 y el otro, un Toyota Avensis. Uno de los dos vehículos era el coche oficial del teniente general Cardiel.
Días atrás, los agentes del Núcleo de Servicios de la Comandancia zaragozana habían recibido la orden de reservar, para esas fechas, dos plazas de aparcamiento en la zona de seguridad.
Según la AUGC, algunos invitados se alojaron en la Comandancia de Zaragoza y fueron trasladados durante todo el fin de semana, en varias ocasiones, en ambos vehículos oficiales, a varios lugares, entre otros el restaurante en el que se celebró el enlace.
La asociación recuerda que tanto los agentes que prestaron servicio de guardia en aquellas fechas, como los agentes conductores y las grabaciones de las cámaras de seguridad permiten corroborar estos viajes.
El 12 de junio, llegaron los dos vehículos a las 13.30 horas y a las 20.15 horas salió el Audi con tres ocupantes, regresando a las 20.50 horas las mismas personas. A las 20.55 horas el Toyota partió llevando a estas mismas personas, que regresaron a la Comandancia a las 21.12 horas.
El 13 de junio, sábado, a las 10.30 horas se marcharon los dos vehículos y regresaron a las 12.10 horas el Toyota y a las 12.50 horas el Audi. El Toyota volvió a marchar y regresó a las 13.35 horas sólo el conductor. A las 16.30 horas el Audi partió con el coger y a las 17.00 horas dos mujeres y un hombre con un carro de bebé partieron en el Toyota, volviendo a las 17.10 horas sólo el conductor. A las 17.15 horas el Toyota partió con dos parejas y un conductor.
El día 14 de junio, domingo, a las 00.15 horas regresaron los dos vehículos ocupados sólo por conductores, que dejaron los coches y comunicaron que se marchaban a cenar. A las 2.15 horas de la madrugada del sábado al domingo los conductores tomaron los vehículos. El Toyota regresó a las 3.45 horas con unas personas que se identificaron como familiares y un bebé, y el Toyota volvió a marchar.
A las 5.40 horas los dos vehículos regresaron y a las 6.50 horas se marchó el vehículo de marca Toyota regresando a las 8.00 horas, que volvió a marchar regresando a las 9.40 horas. Cinco minutos después, a las 9.45 horas, el Toyota partió de nuevo y regresó a la Comandancia a las 12.00 horas, momento en el que el Audi partió para regresar a las 12.30 horas. A las 16.45 horas los agentes conductores cargaron las maletas en dos vehículos, a los que subieron varias personas y partieron.
FINES PARTICULARES
La AUGC afirma que «no existe normativa alguna que justifique la utilización por parte de los máximos responsables de la Guardia Civil, de medios oficiales para fines particulares» y subrayó que el régimen disciplinario de la Guardia Civil recoge esta conducta como infracción.
Esta asociación profesional lamenta que la Inspección de Personal y Servicios de la Secretaría de Estado de Seguridad no le haya comunicado no ya si va a abrir una investigación, sino si se da por enterada de la queja de la asociación profesional.
La AUGC considera «muy graves» estos hechos y presentará una denuncia judicial en los próximos días al entender que pueden encajar con el artículo 434 del Código Penal, según el cual es ilícito que un funcionario público dé «una aplicación privada a bienes muebles o inmuebles pertenecientes a cualquier Administración» pública.
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