RRHH Digital. Las previsiones actuales en relación al potencial impacto que la Gripe A puede tener en el entorno laboral han hecho saltar las alarmas en todas las organizaciones, obligando a revisar sus políticas actuales y planes de acción, principalmente en las áreas de prevención y planes de contingencia. Ésta es una de las principales conclusiones de la jornada sobre Gripe A y Planes de Prevención en el Entorno Laboral organizada por Aon Consulting en Madrid, que ha contado con la presencia de Directores de Recursos Humanos y Jefes de Servicios Médicos de importantes empresas de diversos sectores.
Mª Teresa Alonso Salazar, Director Médico de Atención Primaria Área 11 del Servicio Madrileño de Salud de la Comunidad de Madrid, indicó: “Nos enfrentamos a una gripe sin vacuna actualmente, aunque ésta estará disponible a mediados de noviembre. La mayor preocupación no es su tasa de mortalidad, ya que se trata de una enfermedad leve y de solución espontánea en varios días, aunque sí es relevante por su impacto en la sociedad y el porcentaje de población que pueda verse afectado”. Asimismo, resaltó la capacidad de respuesta de la Comunidad de Madrid en el seguimiento de la epidemia a través de potentes sistemas como la red de “médicos-centinela”.
Planes de contingencia y de continuidad del negocio
La posibilidad de una pandemia de Gripe A puede ser una oportunidad para que las organizaciones revisen y actualicen sus Planes de Continuidad de Negocio, e incluso de que aquéllas que no cuenten con uno se planteen su puesta en marcha.
Desde el punto de vista del consultor, estos planes deben ser exhaustivos e incluir aspectos como la gestión de la crisis, comunicación, gestión del personal, recuperación de infraestructuras, negocio y sistemas, y lógicamente, mantenimiento. Según Fernando Caballero, Director de Aon Global Risk Consulting, “los Planes de Continuidad normalmente abordan los escenarios más conocidos, pero la mayoría no contempla situaciones como las planteadas por una pandemia u otro evento extremo”.
Por su parte la Dra. Pilar Alfranca, Directora del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Grupo Acciona, destacó que se trata de la primera pandemia que se “retransmite” en tiempo real principalmente a través de Internet, cobrando un gran protagonismo.”El objetivo de nuestra empresa ha sido el de reducir al máximo su incidencia, para lo cual se han establecido medidas como la creación de una Comisión de Seguimiento así como un plan específico de recuperación y respuesta”.
Emilio Ruiz, Director de Gestión de Recursos Humanos de Leroy Merlin, afirmó que la preparación para la pandemia es una responsabilidad en primer lugar de la Administración Pública, aunque compartida por todos: sociedad, empresa y empleados. “La información y la comunicación son un aspecto esencial, siendo la prevención la mejor medida. Nuestro plan de actuación, basado en la lógica y el sentido común, incluye por ejemplo un equipo de coordinación que contempla sustitutos para cada caso concreto”.
Uno de los principales costes de la gripe puede ser el absentismo laboral. En este sentido el Dr. Javier Sanz, Director del Servicio de Medicina del Trabajo y Prevención de Deloitte, indicó que “el problema de esta gripe no es la letalidad sino el pánico que puede generar esta situación. La gripe aviar, por ejemplo, afectó a pocas personas pero su tasa de mortalidad alcanzó el 50%. En cualquier caso, es fundamental contar con planes de actuación y prevención que permitan la continuidad del negocio”.
Enfoque desde el Sector Asegurador
En relación con la Asistencia Sanitaria, una epidemia de Gripe A supone una situación excepcional que demanda soluciones a muchos niveles, por lo que existirá la necesidad de complementar los servicios públicos con los privados.
La Dra. Mª José Sanagustín, Directora de Salud de Aon Consulting, indica: “Para la empresa es importante analizar la postura de las compañías aseguradoras privadas y comprobar el alcance de sus propias pólizas”. La práctica totalidad de las compañías de salud excluye en sus condicionados la cobertura asistencial de las epidemias declaradas oficialmente, aunque la postura de la mayoría es aceptar los gastos de asistencia ambulatoria hasta que se llegue a la sospecha del diagnóstico, para posteriormente excluir la prueba y el tratamiento. En este sentido, resaltó la importancia del efecto mediático en la actitud de las aseguradoras privadas y su intento por proteger a sus asegurados”.
En cuanto a los seguros de Accidentes y de Vida la Gripe A, al tratarse de una enfermedad, no es objeto de cobertura por los primeros. En relación con los seguros de Vida, en la mayor parte de las pólizas estaría incluido tanto el fallecimiento como la invalidez ocasionada por la epidemia, aunque las compañías aseguradoras no esperan incidencias significativas en la siniestralidad y en principio le darán el mismo tratamiento que a cualquier otro siniestro.
Aumento del riesgo de pérdida de ingresos y gastos extraordinarios
La declaración de una pandemia puede suponer además para una empresa enfrentarse a mayores riesgos de pérdida de ingresos y de gastos extraordinarios (como consecuencia de cierre de instalaciones, escasez de empleados, interrupción de procesos o disminución del número de clientes), así como de posibles reclamaciones por parte de terceros, riesgos habitualmente cubiertos por los seguros de Lucro Cesante y de Responsabilidad Civil.
Según Javier Pérez, Director Técnico de Aon Risk Services, “En términos generales, los seguros de Daños Patrimoniales y Lucro Cesante no proporcionan cobertura ante los riesgos derivados de una pandemia. Existen extensiones de cobertura que cubren pérdidas de ingresos y gastos adicionales no originados por un daño material y que podrían dar solución a ciertos riesgos aunque el mercado asegurador ha restringido la suscripción de extensiones especiales para riesgos de pandemia, y en el caso de que puedan negociarse, su alcance sería muy limitado y con coste adicional”.
En cuanto a las reclamaciones por Responsabilidad Civil, sería necesario que concurrieran todos los requisitos generales (acción u omisión, culpa, daño y nexo de causalidad) para que el asegurado sea considerado responsable por un órgano judicial, y las posibilidades de que esto ocurra son reducidas.
En el caso de reclamaciones de empleados, el mercado asegurador interpreta que el hecho de contraer Gripe A no constituye accidente laboral, por lo que no estarían cubiertas. Sólo en el caso de que un órgano judicial dictaminara lo contrario habría que examinar las exclusiones de la póliza y analizar las posibles consecuencias. En cuanto a las pólizas habituales de Responsabilidad Civil, no contienen en la actualidad ninguna mención específica a la Gripe A ni exclusiones genéricas relacionadas con pandemias, ni está previsto que introduzcan por parte del mercado asegurador.
La Jornada estuvo presentada por Leonardo Ligués, CEO de Aon Consulting, y moderada por Jorge García Perrote, Director Comercial de la compañía.
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