El vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, auguró ayer que «seguramente a partir del segundo semestre del 2010» será cuando la economía española podrá volver a «construir, a crear puestos de trabajo».
«Espero que el proceso de creación de puestos de trabajo sea a finales del año 2010, pero tardaremos bastante en crear el número suficiente de puestos de trabajo como para compensar la bolsa de desempleo que se ha acumulado durante los últimos meses», advirtió durante su intervención en un almuerzo del Foro ABC.
Según indicó, lo que queda de 2009 y el primer semestre de 2010 van a ser «meses con datos negativos sobre el paro», tal y como se podrá constatar a través de los datos de paro registrado y de la Encuesta de Población Activa (EPA), por lo que reconoció que en este período todavía «va a aumentar el desempleo».
En esta línea, explicó que a pesar de las «incipientes señales de recuperación», el país aún se encuentra «inmerso» en los efectos de la crisis. De hecho, destacó que España tiene «por delante meses muy difíciles», ya que aunque se vislumbre el «horizonte de la salida de la crisis», para el Gobierno ésta no será real hasta que se pueda «confirmar una recuperación efectiva del mercado de trabajo».
Chaves expuso que las previsiones del Ejecutivo apuntan a un comienzo de recuperación en el año 2010, coincidiendo con las estimaciones de la UE, que confirman que la recesión en España será «algo menos intensa que en la zona euro, pero algo más duradera».
HOJA DE RUTA «BIEN DEFINIDA».
Asimismo, subrayó que el Gobierno tiene una «hoja de ruta bien definida, asentada en las realidades de hoy y orientada hacia un futuro de crecimiento económico, sostenibilidad, creación de empleo y desarrollo de políticas sociales». Agregó que un elemento importante de esta hoja de ruta es el «esfuerzo de solidaridad con los que están en peores condiciones».
Insistió en que el Gobierno no ha actuado «espontáneamente» y no se ha «inventado medidas», al tiempo que defendió que las medidas que ha adoptado son «similares» a las del resto de países de la UE. Agregó que las medidas adoptadas son el resultado del «consenso europeo e internacional».
Para Chaves, el hecho de tener una hoja de ruta no quiere decir que no haya que ir «adaptando la acción política y las medidas económicas a la realidad de cada momento, que a veces cambia de forma acelerada». Además, abogó por generar un nuevo modelo de crecimiento económico sostenible, tal y como plantea la Ley de Economía Sostenible que se aprobará próximamente.
Por otro lado, adelantó que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2010 responderán a los criterios de «austeridad, gasto social y mantenimiento de la inversión productiva», al tiempo que recalcó que las «modificaciones o subidas de impuestos» anunciadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, serán «limitadas, temporales, y siempre dentro de un principio de moderación».
A este respecto, comentó que el PSOE tiene la obligación de sacar los PGE adelante y por eso negocia con los grupos que estima oportuno, incluyendo a ERC, partido concreto por el que fue preguntado. «Si el PSOE tuviera mayoría absoluta, se le acusaría de prepotencia y de sacar el rodillo. ERC es un partido que legalmente se presenta a las elecciones. No negociaríamos nada con partidos que fueran contra nuestro programa, nuestros principios o nuestros valores», destacó.
Con la intención de superar la crisis, el vicepresidente tercero manifestó el deseo del Gobierno de «acotar espacios para el consenso» y llamó a la concertación a través del diálogo social, diálogo autonómico y diálogo entre partidos políticos, en particular con el PP. «Diálogo sobre la Ley de Economía Sostenible, diálogo con la meta de alcanzar un acuerdo sobre el horizonte energético español hasta 2020, y diálogo sobre educación», señaló.
TASA VERDE.
Por otro lado, preguntado acerca de la posibilidad de que el Gobierno vaya a aplicar una «tasa verde», Chaves se limitó a responder que esa es una hipótesis que a él personalmente le gusta. Eso sí, puntualizó que las propuestas fiscales concretas del Gobierno se conocerán el sábado cuando se aprueben los PGE.
Sobre las declaraciones del ex ministro de Economía socialista, Carlos Solchaga, poniendo en duda que se puedan recaudar 15.000 millones de euros subiendo impuestos, Chaves puntualizó que Zapatero habló de recaudar «hasta 15.000 millones», y matizó que «se podrá recaudar más o menos, pero depende de las figuras impositivas que se puedan mover».
Acerca de si subir impuestos es o no de izquierdas, argumentó que «todo depende del momento y de los colectivos a los que vayan dirigidas las subidas», ya que la política fiscal nunca puede ser igual en un ciclo expansivo que en recesión económica.
CRÍTICAS AL PP.
En su opinión, en momentos como el actual es «aún más exigible una actitud de responsabilidad» de todos aquellos relacionados con asuntos públicos, y agregó que el PP debería «hacer una reflexión seria e interrogarse sobre si al país, no a ellos como partido, le interesa una política constante de confrontación, de ‘no’ por sistema, de negativa permanente al diálogo y al acuerdo».
«¿Cree el PP de verdad que eso es lo que quieren los españoles? ¿Es eso lo que redunda en beneficio de España y de los españoles? El PP debería preguntarse si es legítimo utilizarlo todo en esa permanente política de confrontación. Hasta ahora así ha sido, incluyendo el descrédito de instituciones fundamentales para un Estado de Derecho como la Policía, la Fiscalía o los tribunales», argumentó Chaves.
A su juicio, para ser alternativa «real» para el país «no basta con el desgaste del Gobierno y la política de tierra quemada», sino que se necesita capacidad política para poder y saber hacer propuestas concretas dentro de un proyecto alternativo, así como «tener el suficiente coraje político para explicar ese proyecto y esas propuestas concretas a la ciudadanía».
Por último, Chaves defendió la importancia del Estado de las Autonomías y señaló que la España de hoy no habría sido posible sin la España de las Autonomías. Según planteó, «habría sido otra y no tan desarrollada y tan fuerte», por lo que afirmó que quienes están en contra de este modelo «cometen un gravísimo error».
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