Los sindicatos mayoritarios en Banco Popular (UGT, CC.OO y CGT) se reunirán mañana con responsables de la entidad para negociar el cierre de las oficinas el sábado por la mañana, y seguir así el camino abierto por Banco Santander.
Los sindicatos han mantenido ya varios encuentros con la entidad sin que se alcanzara ningún acuerdo. En líneas generales, piden compensar las horas que los trabajadores dejarán de realizar los sábados ampliando la jornada laboral en media hora, opción que la entidad rechaza.
En concreto, la reivindicación de los tres sindicatos se centran en que los empleados tengan horario de ocho a tres y media de lunes a jueves, pero que los viernes salgan a las tres, ya que el número de sábados que los empleados del Popular deben realizar es inferior a los de Banco Santander, por lo que el número de horas a completar también es menor, explicaron a Europa Press fuentes sindicales.
La dirección del Banco Popular, por el contrario, es partidario de abrir dos tardes durante la semana o de aplicar jornada partida, algo que los sindicatos rechazan de manera tajante. No obstante, los trabajadores aseguran que «hay posibilidades de acercamiento y confían en cerrar un acuerdo como el de Banco Santander».
A la lucha por el cierre de los sábados también se han sumado los sindicados de BBVA, aunque la negociación aún no ha comenzado. La Comisión Ejecutiva de UGT se reunió la pasada semana para trazar las líneas de negociación y los sindicatos se encuentran a la espera de fijar, junto con la entidad, un primer encuentro para acercar posiciones.
UGT defiende que el cierre de los sábados supondrá un «ahorro considerable de costes» para la entidad que preside Francisco González, hará «innecesaria la contratación de ETTs» y contribuirá a implantar en la clientela la cultura del uso de medios telemáticos, mientras que a los empleados les permitirá conciliar su vida laboral y familiar y eliminar el estrés.
Los comentarios están cerrados.